El Litoral
La inesperada decisión de Arabia Saudita de levantar la prohibición de que las mujeres manejen automóviles agitó a la sociedad del reino islámico ultraconservador, desatando elogios de jóvenes y clérigos y quejas de otros que dicen que no permitirán que sus mujeres o hijas conduzcan.
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Télam
La inesperada decisión de Arabia Saudita de levantar la prohibición de que las mujeres manejen automóviles agitó a la sociedad del reino islámico ultraconservador.
La decisión fue interpretada por muchos como una señal del debilitamiento del poder de los sectores ultraconservadores para imponer su voluntad en momentos en que el príncipe heredero saudita, de apenas 32 años, redobla el paso de una serie de delicadas reformas bajo el gobierno de su padre, el rey Salman.
La autorización para que las mujeres manejen automóviles es la reforma más radical concretada hasta ahora en el marco de la campaña del príncipe heredero Mohamed bin Salman para modernizar un reino que en muchos aspectos, sobre todo sociales, permanece anclado al pasado.
Luego de allanarse el camino hacia un ejercicio de facto del poder, el príncipe Mohamed parece no tener rivales inmediatos dentro de la familia real y, al ser tan joven, su autoridad podría perdurar décadas.
La habilidad que muestra para impulsar reformas parece indicar que, aun cuando representen una porción importante de la población, los sectores conservadores no están dispuestos a desafiar al joven príncipe ni al rey ni tienen la capacidad de generar una oposición de otros miembros de la familia real o de la sociedad.
En 1990, cuando activistas lanzaron la primera campaña contra la prohibición de manejo, mujeres que la desafiaron en la capital, Riad, fueron detenidas, despedidas de sus trabajos e impedidas de viajar al extranjero durante un año.
Mujeres sauditas celebraron hoy los cambios, que también fueron avalados por clérigos conservadores y miembros del gobierno.
"Este es un paso enorme para las mujeres, es hermoso ver a las mujeres tras el volante. Metafóricamente, creo que es como que la mujer ahora maneja su propia vida. El patriarcado, lentamente pero con seguridad, está dando paso a una mayor igualdad. Esto es sorprendente", la joven Sultana al-Saud, una estudiante de 26 años, en declaraciones en Riad al diario británico The Guardian.
La decisión fue elogiada por líderes mundiales.
Apenas tres años atrás, dos mujeres sauditas fueron detenidas por más de dos meses por desafiar la veda. Otras fueron detenidas en años sucesivos por el mismo motivo. En algunos casos, las mujeres sufrían el secuestro de sus autos durante meses. En 2011, durante las protestas de la Primavera Árabe, una mujer saudita fue sentenciada a 10 latigazos por manejar, aunque el entonces el rey revocó la sentencia.
Según las nuevas reglas, las mujeres podrán obtener sus licencias de conducir a partir de junio próximo y no necesitarán contar con el permiso de su marido o del varón que oficia como su tutor o guardián.