En medio del frenético avance de la variante Ómicron, cada vez más Gobiernos deciden modificar los criterios de diagnóstico y tiempos de aislamiento para las personas contagiadas, con síntomas de Covid-19 y sus contactos estrechos, una posibilidad que se abrió con la avanzada campaña de vacunación en esos países y las facilidades de los autotesteos.
Este giro responde principalmente a dos motivos: por un lado, la saturación del sistema de atención primaria de testeos y, por otro, el modo en que los aislamientos prolongados de contactos estrechos y contagiados no graves afectan a la productividad de muchas empresas cuando los Gobiernos esperaban estar transitando un período de recuperación económica sostenida.
En América, uno de los países que primero modificó sus reglas fue Estados Unidos, el más afectado a nivel global por la pandemia de coronavirus y que en la última semana registró un aumento del 66% en las infecciones y del 18% en muertes.
Luego que expertos aseguraran que se contagia más dos días antes y tres después de desarrollar síntomas, la red de Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomendó reducir de 10 a cinco días los tiempos de aislamiento de infectados y contactos estrechos, que podrán retomar sus actividades presenciales si no tienen síntomas y usan máscara durante cinco días más, sin necesidad de testeo previo.
Además, quedan exceptuados de la cuarentena los contactos estrechos que tengan una tercera dosis de refuerzo, si usan tapabocas en todos lados al menos durante 10 días.
Panamá se sumó a esta tendencia y disminuyó de 14 a 10 días el período de confinamiento para infectados, mientras que contactos estrechos deben realizar una cuarentena de cinco días a partir de la fecha de contacto con el positivo, presente síntomas o no, y para recibir el alta serán necesarios dos resultados negativos.
En este contexto, Argentina disminuyó de 10 a cinco días el tiempo de aislamiento para contactos estrechos, y el ente regulador Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) evalúa la aprobación del autotest en farmacias.
Estos tests de detección hogareña del virus ya se usan en Europa, donde la demanda es excepcionalmente alta debido a la explosión de casos por la variante Ómicron, y en Estados Unidos, donde recientemente llegaron a agotarse pese a haber unos 50 tipos de kits autorizados.
En Europa son varios los países que modificaron su metodología de detección y protocolo para contagios de Covid-19, por temor a la paralización de algunos sectores económicos y servicios esenciales, como hospitales y transportes.
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Uno de los primeros en informar las nuevas reglas fue el Reino Unido, que atraviesa el peor repunte de contagios debido a la nueva variante más contagiosa informada por Sudáfrica en noviembre último.
El Gobierno británico redujo la semana pasada de diez a siete días el período de cuarentena para las personas con esquema completo de vacunación, pero para ello es necesario obtener dos pruebas de antígenos negativas realizadas al sexto y séptimo día haberse aislado.
Por su parte, Italia, que actualmente registra entre 2 y 3 millones de personas aisladas, eliminó la cuarentena a partir del 10 enero para aquellos que, vacunados con dos o tres dosis, sean contacto estrecho. Deberán, eso sí, usar tapabocas durante 10 días y hacer un text en la mitad solo si presenta síntomas.
En Francia también hay un creciente consenso alrededor la reducción del período de cuarentena de 10 a 7 días para quienes estuvieron en contacto con un caso positivo pero tienen la vacunación completa, una decisión que, en cambio, Portugal y España ya tomaron.
El Gobierno de España decidió el miércoles reducir de 10 a siete días la cuarentena para positivos para intentar lograr un equilibrio entre la "salud pública" y "el crecimiento económico", cuando el país superó los 100.000 casos.
En Grecia, donde la variante Ómicron ya supera el 70% de los nuevos casos, el Gobierno acortó de 10 a cinco días la cuarentena para los contagiados asintomáticos o con síntomas leves, independientemente de si se vacunaron o no, mientras que los profesionales de la salud deben presentar una prueba negativa. Todos deben usar tapabocas al menos cinco días más.
En paralelo, en la región de Medio Oriente, Israel, donde la gestión de la pandemia se focaliza en la vacunación a pesar del mayor número de infecciones en tres meses, se anunció que cualquier persona totalmente vacunada y expuesta a un caso positivo solo deberá permanecer en cuarentena hasta que de negativo en una prueba molecular.
En el otro extremo de las estrategias se ubica Sudáfrica, que dejó de lado la localización de contactos y el confinamiento para centrarse en la inmunización.
El Gobierno anuló el confinamiento para infectados debido a que las estrategias de contención ya no son apropiadas porque un alto porcentaje de casos es asintomático. Si alguien tiene síntomas debe testearse, pero en caso de ser positivo solo tendrá que usar tapabocas y controlarse durante cinco o siete días.