La campaña del presidente Donald Trump presentó otra demanda en Michigan impugnando los resultados de las elecciones, en un nuevo esfuerzo para revertir la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020.
La campaña del presidente Donald Trump presentó otra demanda en Michigan impugnando los resultados de las elecciones, en un nuevo esfuerzo para revertir la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020.
La demanda federal, que la campaña dijo que presentó el martes por la noche, busca evitar que el estado certifique los resultados que muestran al demócrata liderando por casi 146.000 votos, mientras el presidente republicano insiste en que no acepta el triunfo de Biden.
La campaña pidió a un juez que impidiera que Michigan certificara las papeletas de votación supuestamente fraudulentas, las recibidas después del día de las elecciones, las procesadas cuando los observadores no estaban presentes y las contadas con máquinas de tabulación o software defectuosos.
Los jueces de Michigan ya rechazaron al menos dos demandas anteriores que impugnan los resultados de las elecciones estatales. Otras demandas fueron desestimadas en Pensilvania, Nevada, Arizona y Georgia, todos estados donde Biden tiene una ventaja. El líder público del esfuerzo fue Rudy Giuliani, el abogado personal del presidente que criticó a los medios de comunicación por proyectar a Biden como el ganador durante el fin de semana.
La campaña de Trump proporcionó una copia de la denuncia de 31 páginas, que no pudo verificarse de inmediato en un tribunal federal en el distrito occidental de Michigan. No obstante, los expertos legales dicen que las demandas no cambiarán sustancialmente el recuento de votos ni proporcionarán suficientes votos para que Trump gane en el colegio electoral.
La campaña de Trump no proporcionó evidencia de un fraude electoral generalizado.
Trump demandó el lunes para impedir que Pensilvania certifique sus resultados electorales, alegando que las irregularidades en la votación justifican mantener al ganador sin declarar mientras el caso avanza. Biden lidera en Pensilvania, que tiene 20 votos electorales, por casi 46.000 votos, según Associated Press.
En los últimos días la ofensiva contra los resultados electorales no se limitó a Trump y su equipo, sino que sumó a varios republicanos de primer nivel.
La reacción más significativa fue de parte del fiscal general de Estados Unidos, William Barr, quien el lunes autorizó a funcionarios del Departamento de Justicia a abrir investigaciones sobre posibles irregularidades en la elección presidencial, aunque reconoció que no hay evidencia concluyente.
Barr recibió el apoyo del líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, quien pronunció un discurso el lunes temprano diciendo que el presidente tiene “100% el derecho” de cuestionar los resultados de las elecciones. El anuncio del fiscal general se produjo después de reunirse con el líder republicano del Senado en el Capitolio.
El Departamento de Justicia dijo que ni Trump ni nadie en la Casa Blanca le había pedido a Barr que tomara medidas, pero algunos legisladores republicanos firmaron una carta recientemente pidiéndole que interviniera.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, también rechazó los resultados y aseguró que “habrá una transición fluida al segundo período del presidente Trump”.
En conjunto, los demócratas dicen que las medidas representan lo que podría ser un esfuerzo del Gobierno federal para cambiar los resultados de una elección en Estados Unidos, algo que no tendría paralelo en la historia moderna de la nación. La negativa de Trump a ceder también dificultó el proceso legal de transición, lo que obligó a Biden a realizar eventos públicos para enfatizar su postura presidencial.
Trump señaló que está animado por sus posibilidades de un segundo mandato. “¡GANAREMOS!” tuiteó Trump el martes en la mañana. Trump y sus partidarios tienen hasta el 8 de diciembre para finiquitar cualquier impugnación legal.
Entretanto, Biden sigue adelante con la formación de su Gobierno. Se espera que nombre a un jefe de Gabinete esta semana y planea hacer anuncios adicionales de políticas.