Miércoles 25.11.2020
/Última actualización 11:52
Cerca de un centenar de ballenas piloto o calderones quedaron varados en las playas de las islas Chatam, un alejado archipiélago situado a unos 500 km al este de la isla del Sur, en Nueva Zelanda, lo que complicó las operaciones de salvamento, anunció este miércoles el ministerio de biodiversidad.
El Departamento de Conservación de Nueva Zelanda (DOC) dijo que en total 97 ballenas piloto y tres delfines murieron en el varamiento, añadiendo que fueron notificados del incidente el domingo.
Jemma Welch, que trabaja en ese ministerio, dijo que 69 delfines estaban ya muertos cuando llegaron las autoridades encargadas de la protección de la fauna salvaje. Asimismo, precisó que otras 28 ballenas piloto así que tres delfines fueron sometidos a eutanasia.
Welch explicó que las autoridades se vieron obligadas a tomar una decisión así debido al fuerte oleaje y a la práctica seguridad de que este varamiento iba a atraer a grandes tiburones blancos.
Gentileza Equipos de rescate intentan empujar mar adentro este sábado a unas 25 ballenas piloto que quedaron varadas frente a las costas de la localidad neozelandesa de Coromandel, en la Isla Norte del país oceánico.EFE/Annaliese Frank/ArchivoLa comunidad maorí ha organizado una ceremonia en honor de su "alma" mientras sus restos se descomponen naturalmente, subrayó.
En 1918, las islas Chatham registraron un varamiento masivo con más de mil cetáceos muertos.
El calderón puede alcanzar hasta seis metros de largo y es una especie muy extendida en las aguas neozelandesas.
Aunque los científicos llevan estudiando estos varamientos desde hace décadas, todavía se desconocen las razones que llevan a los cetáceos a esta forma de suicidio.
Captura de videoSegún los investigadores, los globicéfalos podrían desviarse siguiendo a un miembro del grupo enfermo. Las condiciones metereológicas o la presencia de depredadores podrían también llevarlos a desviarse de su itinerario.