La idea es utilizar este tipo de tarjetas, similares a las de débito, que no están asociadas a cuenta bancaria alguna.
La idea es utilizar este tipo de tarjetas, similares a las de débito, que no están asociadas a cuenta bancaria alguna.
Se cargan con dinero y luego se va utilizando para hacer pagos electrónicos, y son útiles para no tener que llevar dinero físico en todo momento.
La empresa Mastercard extendió el uso de ese tipo de plásticos en ese país desde que en 2014 se sancionó la Ley de Inclusión Financiera, que obliga a que todos los pagos de salarios se hagan por medios electrónicos.
En Uruguay ya existen más de un millar de comercios que emiten estas tarjetas de forma rápida, las cuales son innominadas, no tienen titular, con sólo presentar DNI y fotocopia.
Los comerciantes de Uruguay están preocupados por el impacto que tendrá sobre la temporada turística el impuesto a los consumos en dólares en el exterior.
El turista que llega a Uruguay con pesos argentinos tiene que comprar pesos uruguayos y luego cargar esos fondos en la tarjeta prepaga y, a partir de ese momento, manejarse con ese plástico durante sus vacaciones hasta un límite de diez mil dólares.
Por este sistema el turista logra obtener pagar un dólar de algo más de $ 70 frente a los $ 82 del denominado "dólar solidario".
La diferencia se obtiene porque la operación de cambio de pesos argentinos por uruguayos no está sujeta al 30% de recargo del impuesto argentino.
El uso de la tarjeta da también otras ventajas, como acceder a beneficios fiscales de los que gozan los uruguayos, como un 24% de descuento al impuesto a los combustibles en zona de frontera y 9 puntos de IVA en consumos gastronómicos, a los que se le suman 4% por el uso de un medio electrónico para el pago.
Con información de NA.