Uruguay superó el millón de vacunados contra el coronavirus con una tercera dosis del laboratorio estadounidense Pfizer, informó el sistema de monitoreo de suministros del Ministerio de Salud Pública (MSP).
Uruguay superó el millón de vacunados contra el coronavirus con una tercera dosis del laboratorio estadounidense Pfizer, informó el sistema de monitoreo de suministros del Ministerio de Salud Pública (MSP).
Hasta este miércoles, 1.005.250 de personas habían recibido una dosis de refuerzo, en el marco de una campaña que comenzó en agosto.
La tercera dosis de refuerzo fue aprobada para todas las personas de edad inferior a 60 años o inmunodeprimidas, que completaron el proceso con dos dosis de Pfizer o la china SinoVac a partir de los seis meses de la última aplicación, según el portal de información Subrayado.
A aquellos que recibieron el antídoto SinoVac les fue inoculada una tercera dosis de Pfizer, y en el caso de pacientes inmunodeprimidos que recibieron dos dosis de Coronavac, les fueron aplicadas dos dosis de Pfizer.
Las personas que fueron inmunizadas con Pfizer recibieron solo otra dosis. Desde este lunes, el programa de vacunación de refuerzos fue extendido a todos los mayores de 60 años y el personal sanitario, recogió la agencia de noticias ANSA.
Cuando van 222 días de la campaña de vacunación, el 77,28% de la población l uruguaya ya tiene su primera dosis, y el 72,98% cuenta con el esquema completo de dos, según datos de la cartera sanitaria.
La cantidad de personas que tienen una dosis asciende a 2.738.192 y como la meta es vacunar a 3 millones, eso equivale a 91,46%. Con dos inyecciones hay 2.585.642 personas, o sea el 86,36% de la población.
Con todos estos datos, Uruguay promedia 178.63 dosis por cada 100 habitantes, con lo que se convirtió en uno de los países más avanzados del mundo en cuanto a campañas de vacunación.
Esto, pese a que el gobierno del presidente Luis Lacalle Pou fue criticado al inicio de la pandemia por iniciar tardíamente la vacunación y por escoger la marca SinoVac, que es una de las que tienen más baja eficacia para frenar el contagio.
La aplicación de terceras dosis es un procedimiento cuestionado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que defiende una mayor equidad en la distribución del remedio que escasea en los países más pobres, especialmente de África.
Con información de Télam