El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, reiteró este lunes que el Gobierno de Estados Unidos financia la subversión en la isla, al replicar un reciente mensaje de Jake Sullivan, asesor del presidente Joe Biden, sobre las manifestaciones y disturbios registrados el domingo en la isla, en tanto se anunció que hoy hablará a la población el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
"El Asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca carece de autoridad política y moral para hablar sobre Cuba. Su gobierno ha destinado cientos de millones de dólares para la subversión en nuestro país e impone un bloqueo genocida, principal responsable de carencias económicas", escribió Rodríguez en su cuenta de la red social Twitter, reportó la agencia Sputnik.
El ministro cubano reaccionó así al pronunciamiento en redes sociales de Sullivan, a propósito de la respuesta del Gobierno de Cuba contra lo que consideró actos de desestabilización
"Estados Unidos apoya la libertad de expresión y reunión en Cuba, y condenaría fuertemente cualquier uso de violencia contra manifestantes pacíficos que están ejerciendo sus derechos universales", tuiteó Sullivan ayer.
Las protestas registrada ayer en Cuba se vinculan con el impacto de la crisis económica y la pandemia del Covid-19, y tuvieron su primer expresión en la occidental localidad de San Antonio de los Baños, a 36 kilómetros al suroeste de esta capital, y replicadas en varios lugares del país.
Tenés que leerInédita y multitudinaria protesta contra el gobierno en CubaEl presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció en un discurso televisado que grupos opositores en el país, a quienes acusó de estar financiados desde EEUU, se han aprovechado de la crisis económica y el rebrote del Covid-19 para incentivar sus acciones desestabilizadoras y para provocar el derrocamiento del Gobierno.
El mandatario llamó al pueblo a enfrentarse a estos elementos desestabilizadores, e imponer la voluntad de la mayoría.
"¡La #RevolucionCubana la defenderemos al precio que sea necesario!", proclamó por su parte el viceministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Peñalver, en un tuit acompañado de un video de simpatizantes comunistas marchando al grito de "¡Yo soy Fidel!" y blandiendo banderas cubanas.
Díaz-Canel, sorprendido por las manifestaciones aparentemente espontáneas en varias ciudades del país - incluida La Habana - respondió convocando a una manifestación de los sectores leales a su gobierno.
"Salgan a las calles donde quiera que se vayan a producir estas provocaciones, desde ahora y en todos estos días", ordenó.
Tenés que leerLa Asamblea General de la ONU pidió nuevamente el fin del embargo a CubaAunque reconoció la "insatisfacción" que pueden sentir algunos cubanos ante la escasez de alimentos y medicinas, combinada con los cortes diarios de electricidad, Miguel Díaz-Canel también acusó a su viejo enemigo Washington de estar actuando.
"Hay un grupo de gente, contrarevolucionaria, mercenaria pagados por el gobierno de los Estados Unidos, pagada indirectamente a través de agencias del gobierno de Estados Unidos para armar este tipo de manifestaciones", afirmó.
El gobierno de Estados Unidos reaccionó el domingo advirtiendo a las autoridades cubanas contra el uso de la violencia contra "manifestantes pacíficos".
Según el sitio de periodismo de datos Inventario, en total el domingo se registraron una cuarentena de manifestaciones, esparcidas en todo el territorio cubano.
La mayor parte fueron transmitidas en directo en las redes sociales, en este país en el que la llegada del internet móvil apenas en 2018 ha servido para promover las reivindicaciones de la sociedad civil.
Durante unas horas, a partir del mediodía de ayer, se cortó el acceso a la 3G en gran parte del país.
"¡Cuba no es tuya!", gritaba una multitud reunida frente a las oficinas del Partido Comunista (PCC), la única formación política autorizada en Cuba.
"Tenemos hambre", "Libertad", "Abajo la dictadura" fueron otras de las consignas que corearon durante esta jornada, cuyo desarrollo motivó que el presidente se trasladara a mediodía a San Antonio de los Baños, la pequeña localidad en la primera concentración, con miles de participantes, y que apareciera después en la televisión estatal.
Un importante dispositivo policial y militar fue desplegado en la capital y varias ciudades de provincia, consignó la agencia de noticias AFP.
Un camarógrafo de Associated Press fue agredido por un grupo progubernamental, mientras que un fotógrafo de la misma agencia resultó herido por la policía, informó la empresa.
Varios coches de policía fueron volcados y dañados por cubanos furiosos y se registraron numerosas detenciones.