Cuba anunció este miércoles que retirará a los miles de médicos que tiene en Brasil, como parte del programa de cooperación "Más Médicos", tras la elección del ultraderechista Jair Bolsonaro como presidente del gigante sudamericano.
Se tarata de los miles de profesionales que forman parte del rograma de cooperación "Más Médicos". La Habana justificó la medida apuntando a "referencias despectivas y amenazantes" del próximo mandatario.
Cuba anunció este miércoles que retirará a los miles de médicos que tiene en Brasil, como parte del programa de cooperación "Más Médicos", tras la elección del ultraderechista Jair Bolsonaro como presidente del gigante sudamericano.
El Gobierno socialista de La Habana justificó la medida apuntando a "referencias despectivas y amenazantes" de Bolsonaro y alegando que el próximo mandatario brasileño quiere cambiar las condiciones del programa y contratar directamente a los médicos.
"Con referencias directas, despectivas y amenazantes a la presencia de nuestros médicos, (Bolsonaro) ha declarado y reiterado que modificará términos y condiciones del programa", señaló el Ministerio de Salud Pública cubano en un comunicado publicado por el diario estatal "Granma".
La Habana acusó a Bolsonaro asimismo de "cuestionar" la preparación de sus médicos y "condicionar su permanencia en el programa a la reválida del título y como única vía la contratación individual".
"Las modificaciones anunciadas imponen condiciones inaceptables e incumplen las garantías acordadas desde el inicio del programa", señaló el ministerio.
Bolsonaro reaccionó rápidamente al anuncio apuntando a contactos entre La Habana y su equipo, que prepara actualmente la transición. Entre otras cosas señaló que su Gobierno, que asume funciones el 1 de enero, quiere que los salarios que paga Brasil sean destinados íntegramente a los médicos y que éstos puedan vivir con sus familias.
"Condicionamos la continuidad del programa 'Más Médicos' a la aplicación de tests de capacidad, el (pago del) salario integral a los profesionales cubanos, hoy destinados mayoritariamente a la dictadura, y a la libertad para traer a las familias", señaló Bolsonaro en Twitter.
"Lamentablemente Cuba no aceptó", agregó. En otro tuit, calificó como "lamentable" que el Gobierno de La Habana "restrinja la libertad de esos profesionales y de sus familiares".
El país caribeño entró al programa en agosto de 2013, cuando la izquierdista Dilma Rousseff, aliada política del Gobierno socialista cubano, estaba aún en la presidencia.
Según La Habana, cerca de 20.000 colaboradores cubanos han participado en "Más Médicos" desde la creación del programa. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) hace de intermediaria entre los Estados de Cuba y Brasil para la contratación.
El Gobierno brasileño paga por cada médico alrededor de 3.500 dólares mensuales, pero los cubanos sólo perciben unos 900 dólares. El resto va a las arcas del Estado cubano.
Éste sostiene que utiliza los ingresos para la financiación del sistema público de salud de la isla, donde los servicios son gratuitos para toda la población.
"Más Médicos" fue creado por Rousseff (2011-2016) para llevar atención médica sobre todo a áreas rurales y desfavorecidas en el gigante sudamericano.
El programa fue controvertido desde el comienzo, aunque el Gobierno conservador de Michel Temer, que asumió el poder tras la destitución de Rousseff en 2016, mantuvo su existencia. "Más Médicos" garantiza asistencia sanitaria a unos 63 millones de personas, según cifras oficiales de Brasil.
El programa está abierto a otros países, pero la mayoría de profesionales que trabajan en él son cubanos llegados a través de la cooperación con la OPS. Los médicos de la isla caribeña suelen trabajar por periodos en la isla y no pueden vivir con sus familias, entre otras restricciones.
Asociaciones de salud brasileñas acusaron al Gobierno de contratar a "personal esclavo" tras el comienzo del programa.
En el pasado hubo también polémicas por las deserciones de algunos médicos, que abandonaron las misiones para intentar homologar sus títulos y trabajar por su cuenta en Brasil. Cuba suele tener problemas con médicos o deportistas que desertan durante sus misiones en el extranjero.
Para Cuba, castigada por una crisis económica crónica desde hace años, la salida del programa implica perder una importante fuente de divisas.
La exportación de servicios médicos es una de las principales fuentes de ingresos para el Gobierno cubano, que tiene profesionales de la salud en más de 60 países, e ingresa con ello más de 10.000 millones de dólares anuales, según cifras oficiales.
Con información de DPA