Este domingo se extendió el mandato de Kais Saied como presidente de Túnez luego de obtener el 90,7% de los votos en las elecciones nacionales.
Kais Saied extenderá su mandato tras obtener el 90,7% de los votos.
Este domingo se extendió el mandato de Kais Saied como presidente de Túnez luego de obtener el 90,7% de los votos en las elecciones nacionales.
Con 15 candidatos suprimidos del total de 17 competidores del actual mandatario, sólo el 28,8% del total del padrón electoral habilitado se presentó a votar, siendo la cifra más baja desde la incorporación de la democracia en 2011.
Además de Kais Saied, Ayachi Zammel, líder del partido liberal Azimun, obtuvo el 7,35% de los votos. El tercero fue Zuhair Maghzaui, líder del progresista Movimiento del Pueblo (Echaab), alcanzó el 1,97% de los apoyos.
La televisión pública tunecina difundió encuestas a pie de urna realizadas por Sigma Conseil, una empresa independiente cuyas cifras generalmente coinciden con los resultados oficiales. Según los sondeos del domingo, Kais Saied lideraba con más del 89% de los votos, seguido por el empresario Ayachi Zammel, actualmente en prisión, con un 6,9%, y por el político de izquierda Zouhair Maghzaoui, quien solía apoyar a Saied y ahora compite contra él, con un 3,9 por ciento.
El panorama concluyente por parte de ONGs tunecinas y del resto del mundo difiere con la gesta iniciada en las revueltas de diciembre de 2010, en la también llamada Revolución de la Dignidad, la cual finalizó en el derrocamiento de del gobierno autoritario de Zine El Abidine Ben Ali y elecciones en octubre de 2011.
Según Human Rights Watch, al menos 170 personas han sido detenidas por motivos políticos o por ejercer sus derechos fundamentales, un centenar de ellas miembros y militantes del partido islamista Ennahda, principal partido desde la revolución de 2011.
En el caso de Saied, fue elegido en 2019 con cerca del 73% de los votos y mantenía un alto nivel de popularidad cuando asumió plenos poderes en el verano de 2021, prometiendo restaurar el orden tras varios años de inestabilidad política.
Su antecedentes recientes también se alejan de las expectativas. En julio de 2022, Saied suspendió la actividad parlamentaria en Túnez, cesó al gobierno y asumió la totalidad del poder ejecutivo. Desde entonces, se le ha acusado de consolidar el poder y socavar la democracia.
En lo que refiere a los estructural, en 2021 se presentó una reforma constitucional que pretende centralizar el poder al sustituir el sistema parlamentario por uno presidencial, opuesto a los valores que desataron aquella Primavera Árabe y que se asoma al régimen previo.
El presidente tunecino, Kais Saied, aseguró que tras este triunfo electoral se dará inicio a una “nueva fase” para el país.
"Las expectativas del pueblo son grandes y es imperativo trabajar para alcanzarlas, en particular restableciendo el papel social del Estado", declaró el mandatario en una reunión con el primer ministro Kamel Madouri, pocas horas después de conocer los resultados preliminares del sufragio, y en la que pidió revisar varias leyes "con una nueva mentalidad y una voluntad inquebrantable" sin desvelar de cuáles se trata.
En la jornada previa a los comicios, Saied manifestó que Túnez "está viviendo la culminación de la revolución" de 2011, que puso fin a dos décadas de dictadura de Zine El Abidine Ben Ali, y prometió "limpiar el país de corruptos, escépticos y conspiradores".
Durante los festejos de partidarios oficialistas, el mandatario fue contundente contra sus opositores: “Vamos a limpiar al país de todos los corruptos y conspiradores”.