Varios países de Europa fueron escenario de manifestaciones contra las restricciones impuestas en este último tiempo para mitigar la propagación de la intensa segunda ola de contagios de coronavirus que afecta a la región y que, según expertos, es más fuerte que la primera, mientras el mundo acumulaba más de 54 millones de contagios y 1,3 millones de muertos.
En concreto, a nivel global, el recuento permanente de la Universidad Johns Hopkins ubicaba hasta este domingo la cifra absoluta de contagios de la Covid-19 en 54.184.358, mientras que las muertes ascendían a 1.314.904 desde que se detectó el primer caso en diciembre pasado en China.
Además, en las últimas 24 horas el mundo reportó casi 608.000 contagios y 9.246 decesos.
El número de casos positivos solo refleja una parte de la totalidad de contagios debido a las políticas dispares y capacidades que tienen los diferentes países para realizar testeos y diagnosticar.
En Estados Unidos, el país más afectado por la pandemia, con cerca de 11 millones de infectados, ayer fallecieron a causa de la enfermedad 1.351 personas, lo que elevó la cifra a 245.614. Nueva York, que llegó a ser epicentro mundial de la pandemia durante la primavera boreal, acumula actualmente más de 23.000 y su alcalde Bill de Blasio, que a fines de septiembre reabrió las escuelas públicas siguiendo un modelo semipresencial, instó a los padres a "prepararse" para su cierre.
Con más de 8,8 millones de casos, Brasil, el segundo país con más fallecidos, registró ayer 921 decesos y alcanzó los 165.658. Allí se celebraban las elecciones municipales, que habían sido postergadas seis semanas debido a la pandemia, por lo que se adoptaron el uso obligatorio de tapabocas y distanciamiento, se exhortó a los votantes a llevar sus propios bolígrafos y se estableció un horario preferencial para mayores de 60 años y un horario general extendido para evitar aglomeraciones.
En tanto, México, donde algunas autoridades desestimaron el uso obligatorio de tapabocas, se contabilizaron 635 muertos, y el acumulado se acerca a los 100.000. Para intentar contener la expansión del virus, la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció el cierre de bares y cantinas durante 15 días y adelantó la hora de cierre de restaurantes, cines y gimnasios.
Después de Estados Unidos y Brasil, los países con más víctimas mortales son India, con 129.635 (y 8.814.579 casos), lo que convierte al país en el segundo con más contagios a nivel mundial; México, con 98.259 decesos (y 1.003.253); y Reino Unido, con 51.766 (y 1.344.356.
La región de Latinoamérica y el Caribe sumaba 423.176 fallecidos y 12.023.640 contagios y es, al día de , la más afectada por la pandemia.
Manifestaciones en todo Europa
Europa -con 334.968 muertos y 14.432.068 casos- está atravesando la segunda ola que, según expertos, pese a que el virus no es estacional, parece ser más fuerte que la que se vivió durante la primavera.
En este contexto, y frente a las diferentes alternativas que tomaron los Gobiernos europeos, varios países fueron este fin de semana escenario de manifestaciones contra las restricciones impuestas a causa de la pandemia, medidas que pueden alargarse meses, según las autoridades alemanas.
En Alemania, donde está en vigencia un confinamiento parcial desde hace dos semanas, el ministro de Economía, Peter Altmaier, advirtió que las medidas podrían durar al menos cuatro o cinco meses más, porque el número de casos es "incluso mucho más alto de hace dos semanas".
"Tendremos que vivir con precauciones y restricciones sustanciales los próximos cuatro o cinco meses al menos", dijo Altmaier en una entrevista con el diario Bild am Sonntag, citada por Sputnik, un día después de que las calles de Frankfurt y otras ciudades se llenaran de manifestantes anti cuarentena que fueron dispersados por la policía con camiones hidrantes.
En tanto, Ugur Sahin, el director general del laboratorio alemán BioNTech, que desarrolla una vacuna del coronavirus, dijo este domingo que espera un retorno a la normalidad a partir del invierno boreal de 2021, si se producen elevados niveles de vacunación, y añadió: "Si todo va bien, empezaremos a entregar la vacuna a fines de este año".
Entretanto Austria, que anunció ayer confinamiento con toque de queda, suma otra estrategia. El canciller Sebastian Kurz, anunció que el Gobierno facilitará testeos a la totalidad de su población, unos 8,8 millones de habitantes, con un programa similar al que puso en marcha la vecina Eslovaquia, que también detectó casos asintomáticos.
"Es un modelo de éxito absoluto y hemos decidido adoptar una medida similar aquí en Austria", indicó Kurz, en una entrevista con la televisión pública austríaca, ORF, citado por Europa Press.