El jefe de la Asamblea Constituyente de Venezuela y referente del chavismo, Diosdado Cabello, negó este martes que exista un proyecto concreto de reforma de la Constitución, pero afirmó que sí "hay ideas" sobre el nuevo texto
Cabello, el jefe de la Asamblea Constituyente de Venezuela afirmó que "hay ideas" sobre el nuevo texto de reforma de la Constitución.
El jefe de la Asamblea Constituyente de Venezuela y referente del chavismo, Diosdado Cabello, negó este martes que exista un proyecto concreto de reforma de la Constitución, pero afirmó que sí "hay ideas" sobre el nuevo texto
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"No hay ningún proyecto de Constitución. Ideas sí hay, las comisiones están desplegadas en toda Venezuela, pero no existe nada plasmado (en papel)", señaló en una rueda de prensa del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), citado por la agencia DPA.
La Asamblea Constituyente se instaló en agosto de 2017, luego de una controvertida elección promovida por el presidente Nicolás Maduro, para funcionar durante dos años, a fin de redactar la nueva Carta Magna.
Pero en los hechos el cuerpo, compuesto íntegramente por chavistas, se declaró plenipotenciario y desplazó a la Asamblea Nacional (Parlamento), dominada por la oposición al gobierno de Maduro.
Cabello señaló que el carácter plenipotenciario permite considerar la extensión de su funcionamiento.
"No hay ningún inconveniente de hacerlo porque es la Asamblea Constituyente; si la mayoría decide que va a prorrogarse el tiempo de permanencia y es votado, se prorroga", aseveró.
Recientemente circularon varios proyectos de reforma constitucional que sugerían un aumento del mandato presidencial de seis a siete años, así como cambios en los procesos electorales.
La Constitución vigente fue aprobada en diciembre de 1999, en un referéndum, y el entonces mandatario Hugo Chávez intentó reformarla en 2007 para convertirla en una Carta Magna socialista, pero el proyecto fue rechazado en una consulta.
La Asamblea Constituyente, dominada totalmente por el chavismo, ha sido desconocida por la oposición venezolana, que calificó de fraudulenta la convocatoria de Maduro, a la vez que varios gobiernos también la califican de ilegítima.