El primer ministro británico, Boris Johnson, enfrenta una fuerte presión para imponer una segunda cuarentena como hizo Francia y Alemania, tras las advertencias de los científicos que indicaron este jueves que Inglaterra se acerca al pico de infecciones de la primera ola de la pandemia con casi 100.000 casos diarios de coronavirus.
Francia y Alemania ordenaron restricciones radicales durante varias semanas para contener aumentos récord en las infecciones por coronavirus que llevaron a los servicios de salud a sus límites en las últimas semanas.
El martes, el Reino Unido registró su mayor número diario de muertes por coronavirus desde mayo, mientras que ayer se registraron 310 fallecimientos diarios y hoy otros 280, elevando el total de víctimas fatales a 45.955 desde el inicio de la pandemia.
Hasta ahora, el Gobierno de Boris Johnson trató de combatir la propagación del virus con un sistema de alertas escalonado de controles locales, destinado a endurecer las medidas en las regiones afectadas y dejar otras menos restringidas en los sectores con menos casos.
Pero un nuevo estudio del Imperial College de Londres reveló que el ritmo de la epidemia se está acelerando y estima que la cantidad de personas infectadas se duplica cada nueve días.
En ese sentido, Steven Riley, autor del estudio y profesor de dinámica y enfermedades infecciosas de esa institución, le dijo a la cadena BBC que el Gobierno debería decidir rápidamente si quería seguir el modelo de Francia y Alemania porque Inglaterra está en una "etapa crítica" y "algo tiene que cambiar" y agregó que "cuanto antes, mejor".
Sin embargo, el ministro de Vivienda y Comunidades, Robert Jenrick, aseguró al mismo medio que aunque las tasas están muy altas en todas partes del país, el Gobierno aún no quiere un segundo confinamiento total.
Explicó que quiere "tratar de evitar tener un enfoque general a nivel nacional" para las restricciones del coronavirus en Inglaterra, donde existe un sistema regional de alerta de tres niveles.
"No tenemos un plan, hoy, para hacer un bloqueo nacional completo y tal medida sería destructiva para la vida y los medios de vida de las personas y para la salud y el bienestar en general", agregó.
Las naciones que integran el Reino Unido establecieron distintas medidas bajo sistemas de alerta, mientras que la región autónoma de Gales impuso un confinamiento general.
Irlanda del Norte por su parte endureció las restricciones, incluido el cierre de escuelas, y Escocia confirmó los detalles de su nuevo sistema de alerta de 5 niveles.
El ministro de salud en la sombra del laborismo, Jonathan Ashworth, por su parte pidió al primer ministro que celebre una conferencia de prensa para delinear "los pasos que tomará ahora para controlar el virus y salvar vidas".
Actualmente, más de 8 millones de personas están nuevamente bajo severas restricciones en todo el Reino Unido.
Las regiones más afectadas en Inglaterra son todo el Gran Manchester, la región de la ciudad de Liverpool, Lancashire y Yorkshire del Sur que se encuentran actualmente en el nivel "muy alto", con todos sus restaurantes y bares cerrados.
Mientras que desde hoy, las áreas municipales de Nottingham City, Broxtowe, Gedling y Rushcliffe también quedaron en ese mismo nivel.
Londres con la tasa de infección por coronavirus que superó los 100 casos por cada 100.000 habitantes, y en algunos distritos los 200, continúa en el nivel 2 de alerta.
Entre otras medidas, las restricciones del tercer nivel incluyen el cierre de pubs y bares en la región a menos que sirvan comidas sustanciosas y la prohibición de reuniones de diferentes familias en interiores y exteriores, incluyendo en jardines privados.