“Dicen que mandaron un submarino, ¿será que se están volviendo locos?”, preguntó Chávez durante una rueda de prensa con corresponsales extranjeros en el palacio de Miraflores, sede del Gobierno.
Chávez añadió que de ser cierta la información podría considerarse una “ridiculez”, por lo que el sumergible podría denominarse “submarino del ridículo”. Un tramo del discurso del presidente venezolano fue publicado por el diario inglés The Times, en la misma nota en la que hacen referencia al alistamiento del submarino.
Advirtió, sin embargo, que recurrir a un arma tan poderosa “es una amenaza” para Argentina porque implica el potencial “uso de la fuerza militar por parte del viejo y carcomido imperio inglés”.
Chávez señaló que esa posible iniciativa británica se contrapone con la decisión de Argentina de no utilizar la fuerza militar para encarar el problema de las Malvinas.
El gobernante venezolano recordó lo dicho sobre el problema por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, durante la recién finalizada Cumbre del Grupo de Río, en México.
“Qué bueno lo que dijo Lula terminando la cumbre de Cancún. Dijo que no hay ninguna razón geográfica, ética ni política que justifique que el Reino Unido siga manteniendo un dominio colonial sobre las islas Malvinas ni sobre el mar que las circunda”, manifestó Chávez.
Como conclusión al asunto, Chávez expresó que “estaremos pendientes” a la forma en que se desarrolla la crisis, que Argentina ha llevado a las Naciones Unidas.
En el origen del conflicto está la decisión del Gobierno británico de explotar los recursos energéticos existentes en aguas de las Malvinas.
Según el Ministerio británico de Defensa, en el archipiélago está la fragata HMS York, que cuenta con el apoyo de cuatro cazas Typhoon.
EFE