El huracán Ian llegó al oeste de Florida, Estados Unidos, el pasado miércoles con vientos de más de 240 km/h y provocó inundaciones calificadas de "catastróficas" en varias localidades.
El presidente Joe Biden indicó que “podría ser el huracán más mortífero en la historia de Florida". Grandes áreas urbanas permanecen inundadas y puentes caídos imposibilitan la ayuda de las autoridades.
El huracán Ian llegó al oeste de Florida, Estados Unidos, el pasado miércoles con vientos de más de 240 km/h y provocó inundaciones calificadas de "catastróficas" en varias localidades.
Ian también dejó inundaciones históricas y graves destrozos en el centro de la península y se espera que vuelva a tocar tierra este viernes en Carolina del Sur.
El miércoles la tormenta provocó una marejada ciclónica de varios metros de altura que inundó grandes áreas del suroeste de Florida, con localidades como Fort Myers y Naples que han quedado arrasadas en las áreas cercanas a la costa.
Las autoridades calculas que cientos de personas permanecen atrapadas en sus hogares, después de que no siguieran las órdenes de evacuación que se emitieron antes de la llegada del huracán. Algunas se encuentran en áreas que solo son accesibles por puentes que han quedado destruidos.
El presidente Biden habló este jueves desde la sede de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) para hacer una primera valoración del desastre.
"Este podría ser el huracán más mortífero en la historia de Florida", dijo Biden.
En se sentido, al menos 15 muertes se registraron en el sudoeste y el centro del estado en cuestión, según CNN. La cadena estadounidense relevó distintas informaciones locales para llegar a esa cifra.
En la mañana del jueves 29 el sheriff del condado de Lee, Carmine Marceno, dijo que temía que los muertos se podían contar por “centenares”: si bien la cifra oficial es mucho menor, consideran preocupante el volumen de llamadas de emergencia y la imposibilidad de auxiliar a esas personas. “Nos duele, pero todavía no podemos acceder adonde se encuentra mucha de la gente necesitada”.
Antes de su paso por Florida, Ian golpeó con fuerza el oeste de Cuba, donde causó severos daños en la provincia de Pinar del Río.