Varias personas murieron después de que un terremoto de magnitud 7,5 sacudiese este viernes el norte de la isla indonesia de Célebes y provocase un tsunami de hasta dos metros que golpeó las ciudades de Palu y Donggala.
El recuento de daños y fallecidos ha sido dificultado por el daño que han sufrido algunas infraestructuras de comunicaciones y cortes de electricidad. Las olas alcanzaron entre un metro y medio y dos metros.
Varias personas murieron después de que un terremoto de magnitud 7,5 sacudiese este viernes el norte de la isla indonesia de Célebes y provocase un tsunami de hasta dos metros que golpeó las ciudades de Palu y Donggala.
El vocero de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), Sutopo Purwo Nugroho, indicó que el terremoto y el tsunami "causaron varias víctimas", sin especificar una cifra.
"Informes sobre el terreno indican que varias víctimas murieron por el colapso de edificios. El tsunami también golpeó varios asentamientos y edificios en la playa", dijo Sutopo en un comunicado, que reprodujo la agencia Efe.
Por su parte, el director del centro de tsunamis y terremotos de la Agencia de Climatología, Meteorología y Geofísica (BMKG), Rahmat Triyono, dijo al medio local Kompas que las olas alcanzaron entre un metro y medio y dos metros.
La BMKG confirmó la formación del tsunami después de que varios vídeos domésticos mostrasen en las redes sociales como Palu, situada en una estrecha bahía, fue impactada con fuerza por las olas.
El recuento de daños y fallecidos ha sido dificultado por el daño que han sufrido algunas infraestructuras de comunicaciones y cortes de electricidad, que han afectado a cientos de estaciones de la red eléctrica, indicó el ministerio de Comunicación e Información.
La Agencia de Búsqueda y Rescate (Basarnas) enviará un barco y helicópteros para colaborar en las labores de ayuda y las Fuerzas Armadas desplegarán tropas y enviará aviones Hércules C-130.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) situó el hipocentro del terremoto, que se registró a las 18.02 hora local (7.02 de Argentina), a 10 kilómetros de profundidad y a 56 kilómetros al norte de la localidad de Donggala.
Tres horas antes, otro seísmo de 6,1 grados provocó la muerte de una persona, 10 heridos y el derrumbe de varios edificios en la misma zona.
El desastre natural de hoy llega después de que entre el 29 de julio y el 19 de agosto pasados, al menos 557 personas murieran y casi 400.000 resultaran desplazadas por los cuatro terremotos de magnitudes comprendidas entre 6,3 y 6,9 que sacudieron la isla indonesia de Lombok.
Indonesia se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica en la que cada año se registran unos 7.000 terremotos, la mayoría moderados.
Con información de Télam