Playas de arena blanca, aguas cristalinas y suelo coralino. Así es la isla de Barbados , la patria del ron, que busca convertirse en paradisíaco refugio para los miles de trabajadores de todo el mundo que se han visto expulsados de sus oficinas y enviados a teletrabajar a causa del coronavirus.
Tenés que leerEn un pueblo de Italia está prohibido morirseEl Gobierno de esta nación caribeña, que ha visto caer en picado la llegada de turistas tras la quiebra de Thomas Cook y la crisis del coronavirus, ha decidido crear un “sello de bienvenida” que permitirá a cualquier trabajador del mundo instalarse durante 12 meses en la isla y disfrutar de su infraestructura turística mientras trabaja. Los visitantes se instalarán en “villas, complejos turísticos, habitaciones de hotel y casas de alquiler” y dispondrán de espacios de trabajo
La primera ministra, Mia Amor Mottley, ha asegurado que “Barbados es el lugar perfecto para quien busque disfrutar de una parte distinta del mundo, del sol, el mar, una sociedad estable y un país que funciona bien” y ha señalado que la isla cuenta con dos compañías que ofrecen banda ancha que aseguran la conectividad a quien quiera instalarse allí. Según Motley, los visitantes se instalarán en “villas, complejos turísticos, habitaciones de hotel y casas de alquiler”. También tendrían a su disposición espacios de trabajo compartido, según señala el Gobierno en una nota informativa. “No hace falta que trabajes en Europa, Estados Unidos o América del Sur si puedes venir aquí y trabajar un par de meses seguidos e ir a tu país y volver”, ha afirmado.
Barbados, que fue colonia inglesa hasta 1966, es la isla más oriental del Caribe y cuenta con 285.000 habitantes. En apenas dos horas y media se puede dar la vuelta completa al país, de suaves planicies y que tiene 34 kilómetros de largo y 23 de ancho. Como en otros destinos caribeños, la isla tiene playas de arena blanca frente a las cuales se puede hacer snorkel y buceo para observar su suelo coralino.
Según los datos oficiales del Gobierno de Barbados, la pandemia de coronavirus no se ha cebado con la isla, que hasta el momento ha contabilizado solamente 98 personas infectadas y un único fallecimiento.