Actualmente, 'Iota' se ubica en territorio hondureño, a unos 55 kilómetros de Tegucigalpa, según el Centro Humboldt, con vientos sostenidos de 80 kilómetros por hora y se desplaza a una velocidad de 19 kilómetros por hora, según la agencia DPA
Actualmente, 'Iota' se ubica en territorio hondureño, a unos 55 kilómetros de Tegucigalpa, según el Centro Humboldt, con vientos sostenidos de 80 kilómetros por hora y se desplaza a una velocidad de 19 kilómetros por hora, según la agencia DPA
La tormenta tropical recorre la ruta preestablecida y avanza hacia El Salvador y Guatemala, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.
Tras tocar tierra el lunes en Nicaragua como huracán categoría 5 (la máxima en la escala Saffir-Simpson), ahora "Iota se degradó a tormenta tropical, con vientos máximos sostenidos de 105 km/h", en el norte de Nicaragua, informó el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) citado por la agencia de noticias AFP.
El ciclón cambió su rumbo norte y se orientó hacia el oeste, con lo que debía ingresar a la vecina Honduras al final del martes, indicó el organismo hondureño de protección civil de la vecina Honduras (Copeco).
El paso de Iota deja hasta ahora ocho muertos, seis de ellos en Nicaragua, incluidos dos niños que fallecieron al intentar cruzar un río en el sureste del país, según informó la vicepresidenta Rosario Murillo.
En Quilalí, en el norteño departamento de Jinotega, murió también una mujer, de nombre María Duarte, tras caer al agua desde un barranco ubicado cerca de su casa.
En tanto, en el municipio de Wiwilí, en el norteño departamento de Jinotega, dos personas identificadas como Carlos Carazo y su hijo Francisco murieron a causa de un derrumbe.
Mientras que un hombre identificado como Carlos Méndez, de 40 años, murió en la localidad de norteña de Santana.
El gobierno nicaragüense informó que son 63.000 los evacuados por la acción de Iota distribuidos en más de 500 albergues y refugios, detalló DPA.
Graves consecuencias para la infraestructura
"Las consecuencias son desastrosas, catastróficas en términos materiales, en infraestructura", dijo Murillo, quien adelantó que tres importantes puentes del Caribe norte quedaron destruidos.
"El huracán salió de nuestro territorio, pero el riesgo de derrumbes y deslaves se ha incrementado", advirtió la vicepresidenta nicaragüense.
El gobierno nicaragüense informó además que 114.200 viviendas en todo el país quedaron sin energía eléctrica y 47.638 sin agua.
Las otras dos muertes al paso de Iota se registraron una el lunes, en la isla colombiana de Providencia, y la restante hoy, en la comunidad indígena panameña de Ngäbe Buglé.
Más fuerte que Eta, Iota llegó a Nicaragua como huracán con vientos máximos de 260 km/h, según un informe del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC), pero luego comenzó a perder fuerza.
En Bilwi, principal ciudad del Caribe Norte de Nicaragua, hay "caída de árboles, de postes de luz del tendido eléctrico, de techos de casas que salieron por el aire y un hotel que perdió todo el techo", dijo el director del Sistema Nacional de Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), Guillermo González.
Inundaciones repentinas y crecidas de ríos que amenazan la vida de los pobladores se continuarían registrando hasta el jueves en partes de Centroamérica debido a las lluvias provocadas por Iota, advirtió la NHC.
Y en Honduras, Nicaragua y Guatemala esos fenómenos "podrían verse exacerbados por los efectos recientes del huracán Eta", que tocó tierra el 3 de noviembre también en el Caribe nicaragüense y dejó al menos 200 muertos y 2,5 millones de afectados en Centroamérica.
La alerta se extiende también a El Salvador, donde se esperan tres días de lluvia a partir de este martes y se han habilitado ya unos mil albergues en las zonas de alto riesgo.
El presidente, Nayib Bukele, ha enfatizado la necesidad de que haya un "despliegue masivo de personal y las evacuaciones preventivas", según la agencia DPA.
La temporada de huracanes en el Atlántico ha batido récords. Iota es la decimotercera de las 30 tormentas con nombre registradas este año que alcanza la categoría de huracán, lo que obligó a usar el alfabeto griego.
Con información de Télam.