Isaac Herzog juró este miércoles su cargo como el undécimo presidente de Israel, después de haber sido elegido a principios de junio para suceder a Reuven Rivlin, y en su primer discurso prometió representar los intereses de su país cuya unidad interna es "más frágil que nunca".
En su primer discurso como presidente, Herzog prometió representar los intereses de Israel y su punto de vista en el escenario internacional.
De forma paralela, aludió a la necesidad de que la política israelí se desarrolle en un "tono moderado", antes de reconocer que la unidad interna del país y los valores compartidos "son más frágiles que nunca".
Además, según recogió The Times of Israel, lamentó que el odio entre diferentes grupos de la sociedad "tiene un precio muy alto" y pidió la integración de las minorías en la sociedad.
En este sentido, indicó que la mayoría israelí debe mostrar "más cuidado" a la hora de convivir con estas minorías.
"Mi misión, la tarea (central) de mi mandato será hacer todo lo posible para reconstruir la esperanza" para la sociedad israelí, agregó Herzog según informó la agencia de noticias Europa Press.
Durante la ceremonia de su toma de posesión, el presidente de la Knesset o Parlamento israelí, Mickey Levy, destacó que Herzog asume la Presidencia "durante un período difícil, en el que la sociedad israelí está más dividida que nunca".
"Esta es una amenaza existencial para el Estado de Israel, una amenaza más grande que el programa nuclear iraní", agregó antes de expresar su "esperanza" en que el nuevo presidente pueda "liderar un diálogo nuevo y diferente" entre israelíes.
Rivlin, cuyo mandato de siete años expiró el día 9 el mes pasado sin que pudiera presentarse a la reelección, agradeció a la ciudadanía israelí "el privilegio de poder servirles" y, de nuevo, pidió al país "sobreponerse a la fricción (...) en beneficio de los intereses del país".
Herzog, antiguo líder del Partido Laborista de 60 años, obtuvo 87 de los 120 votos de los parlamentarios para lograr la Presidencia de Israel y se impuso así a su rival, la activista Miriam Peretz.
El político cuenta con una importante influencia en el país y es hijo del expresidente Chaim Herzog, así como nieto del primer rabino jefe de Israel.
Asimismo, es el actual presidente de la Agencia Judía de Israel.
La figura del presidente es fundamentalmente ceremonial en Israel, si bien cuenta con la autoridad para dar el mandato para formar Gobierno.
El mandatario es elegido cada siete años a través de una votación secreta entre los 120 miembros del Parlamento