Israel anunció este viernes que bombardeó el cuartel central general del grupo extremista Hezbollah en Beirut, Líbano, mientras que el objetivo del ataque era el líder de la organización, Hassan Nasrallah.
Esta vez, el objetivo del ataque era el líder de la organización, Hassan Nasrallah.
Israel anunció este viernes que bombardeó el cuartel central general del grupo extremista Hezbollah en Beirut, Líbano, mientras que el objetivo del ataque era el líder de la organización, Hassan Nasrallah.
La noticia fue informada por el portavoz Daniel Hagari, que aseguró: "Las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo un ataque preciso contra el cuartel general central de la organización terrorista Hezbollah que sirvió como epicentro del terror de Hezbollah".
Al mismo tiempo, el funcionario agregó que "el cuartel general de Hezbollah fue construido intencionalmente bajo edificios residenciales en el corazón de Beirut como parte de la estrategia de Hezbollah de utilizar escudos humanos".
El vocero señaló que Nasrallah fue el objetivo y que están intentando confirmar si murió o no en el ataque.
El Ministerio de Sanidad libanés sostuvo que al menos dos personas murieron y 76 resultaron heridas en varios ataques aéreos israelíes contra los suburbios del sur de Beirut.
La cartera sanitaria añadió que se trataba de un recuento preliminar de víctimas y los equipos de rescate siguen buscando entre los escombros y el ministerio "espera que el conteo de víctimas aumente en las próximas horas".
Además, la agencia estatal de noticias NNA informó que seis edificios fueron completamente destruidos por los ataques israelíes.
Antes de los ataques aéreos del Estado judío contra el grupo extremista, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, brindó un discurso en la Asamblea General de las Naciones Unidas y consideró: "Israel debe derrotar a Hezbollah. Ese grupo hizo que pueblos del norte de Israel se convirtiesen en ciudades fantasma. Preguntensé cuánto lo tolerarían ustedes si les pasara. He venido aquí a decirles que ya no lo toleraremos. No descansaremos hasta que nuestros ciudadanos puedan regresar a sus hogares".
En este sentido, Netanyahu aclaró que Israel "no está en guerra con los civiles libaneses", sino "contra Hezbollah" e insistió: "Hezbollah coloca misiles en escuelas y hospitales, pone en peligro a su propia población".
"Esta semana, las FDI destruyeron enormes porcentajes de cohetes de Hezbollah construidos con apoyo de Irán. Eliminamos a altos mandos y seguiremos degradando a Hezbollah hasta que se alcancen nuestros objetivos. Estamos decididos a eliminar la maldición del terrorismo", concluyó el funcionario.