Israel comenzó este martes una incursión por tierra y aire en el territorio del sur de Líbano, avanzando por sobre el sector fronterizo en el cual viene intercambiando agresiones con Hezbollah desde hace semanas.
Se trata de una operación terrestre y aérea en el marco de los intercambios que las Fuerzas de Defensa han protagonizado en la zona de la frontera con el grupo chiita. Simultáneamente bombardearon Siria.
Israel comenzó este martes una incursión por tierra y aire en el territorio del sur de Líbano, avanzando por sobre el sector fronterizo en el cual viene intercambiando agresiones con Hezbollah desde hace semanas.
La operación “Flechas del Norte" fue anunciada oficialmente por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), dentro de una esperada escalada del combate contra el grupo chiita armado.
“De acuerdo con la decisión del escalón político, hace unas horas, las FDI iniciaron incursiones terrestres limitadas, localizadas y selectivas, basadas en información precisa, contra objetivos e infraestructuras terroristas de Hezbollah en el sur del Líbano. Estos objetivos están ubicados en aldeas cercanas a la frontera y representan una amenaza inmediata para las comunidades israelíes en el norte de Israel”, indica el comunicado.
Con modus operandi similar al aplicado sobre Franja de Gaza tras el atentado del 7 de octubre por parte de Hamás, desde Tel Aviv ya complementan las tareas de inteligencia con operaciones directas contra sus vecinos libaneses.
“Estas operaciones fueron aprobadas y llevadas a cabo de acuerdo con la decisión del escalón político. La operación “Flechas del Norte” continuará de acuerdo con la evaluación de la situación y en paralelo con los combates en Gaza y en otras zonas”, agrega el texto de las FDI.
“Las FDI continúan operando para lograr los objetivos de la guerra y están haciendo todo lo necesario para defender a los ciudadanos de Israel y devolver a los ciudadanos del norte de Israel a sus hogares”, concluye el documento.
En el marco de las primeras 24 horas, las fuerzas en la frontera norte habrían logrado avanzar unos 5 kilómetros en promedio. En lo que respecta a datos oficiales del Ministerio de Salud de Líbano, 95 personas murieron y 172 resultaron heridas en los ataques contra las regiones meridionales, el valle oriental de Bekaa y Beirut.
En esta nueva ofensiva, Israel buscar degradar la estructura de mando y las líneas de suministro de la milicia libanesa hasta cumplir todos sus objetivos para ponerle fin a un enfrentamiento que lleva escalando desde el año pasado con intercambios de fuego cruzado. Este conflicto desplazó cerca de 60.000 israelíes en el norte.
Este último punto es la cabeza de los actuales y próximos movimientos de Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, quien en la semana previa aclaró su rechazo al plan de paz de Estados Unidos y Francia y reafirmaba la necesidad de mantener la intensidad en el norte, con el objetivo de recuperar el hogar de los radicados en dicha zona del país.
El medio estadounidense NBC News, afirmó que Israel estaba planeando una invasión de mayor envergadura, pero decidió reducirla después que funcionarios de Washington instaran a reconsiderar esa opción durante "extensas conversaciones", consecuencia de los intercambios en la Asamblea General de la ONU.
En la misma jornada, la capital de Siria, Damasco, recibió un ataque aéreo que provocó un total de tres muertes, una de ellas la periodista Safaa Ahmed y otros dos civiles, según los reportes locales.
Según la agencia SANA, las defensas aéreas sirias se enfrentaron a ataques aéreos israelíes que han dejado tres civiles muertos y nueve heridos, así como importantes daños materiales.
Desde Israel aseguran que se apuntó hacia objetivos iraníes claves emplazados en territorio sirio.
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