Durante una conversación telefónica que mantuvieron anoche, Netanyahu le expresó "la solidaridad del pueblo israelí con el pueblo de Brasil" ante la expansión de la pandemia en el país sudamericano y le ofreció "cooperar con industrias brasileñas en la fabricación del equipamiento médico necesario" para hacerle frente.
Además, el mandatario israelí ofreció a Bolsonaro poner en contacto a especialistas de ambos países con el fin de "compartir la experiencia acumulada de Israel en su lucha contra el virus".
Mientras que en Israel la pandemia ha tenido un impacto menor (menos de 17.000 infectados y 281 muertos) y ya se han levantado la mayoría de las restricciones, Brasil es uno de los países que más ha sufrido la propagación de la COVID-19 y registra hasta el momento más de 25.000 fallecidos (más de 1.000 de ellos ayer) y 400.000 infectados.
Durante la conversación entre ambos líderes, Bolsonaro, muy cuestionado por su manejo de la pandemia, felicitó a Netanyahu por la reciente formación del Ejecutivo y le dijo que espera poder seguir fortaleciendo las relaciones bilaterales entre ambos.
El presidente brasileño es uno de los principales aliados de Netanyahu, no solo en América Latina sino en el mundo, y ha mostrado su apoyo a Israel desde el comienzo de su gobierno.
Tras una histórica visita a Jerusalén en abril del año pasado y la promesa, aún no realizada, de trasladar su embajada a la Ciudad Santa, Brasil abrió en diciembre una oficina comercial en la urbe, en lo que fue descrito como un primer paso hacia el traslado, esta año, de la sede diplomática.