Israel registró 2.062 casos diarios de coronavirus, un día después de anunciar su nueva estrategia para contener la expansión del virus que le otorga nuevas funciones al Ejército, con la intención de evitar un bloqueo total de actividades.
Israel registró 2.062 casos diarios de coronavirus, un día después de anunciar su nueva estrategia para contener la expansión del virus que le otorga nuevas funciones al Ejército, con la intención de evitar un bloqueo total de actividades.
La cifra es un nuevo récord diario y llega en medio de una batalla entre las diferentes facciones del Gobierno, sobre cómo parar lo que los medios locales llaman "la segunda ola de contagios".
El flamante coordinador nacional de la pandemia, Ronnie Gamzu, anunció ayer su plan "Escudo de Israel" que dará más control al Ejército en el rastreo de la enfermedad.
El Ejército "tiene las capacidades" y tecnologías para poner freno la transmisión de contagios, afirmó anoche Gamzu, en una rueda de prensa en la que aseguró que este elemento es clave para frenar la propagación del virus.
El plan también prevé aumentar el número de test y controles para evitar que Israel deba imponer medidas restrictivas más duras o incluso un cierre total, algo que el Gobierno intentó eludir hasta ahora, pese al alto número de infecciones diarias.
Hasta ahora, las decisiones del Ejecutivo de coalición eran contradictorias, lo que generó cierto descontento entre la población, que no vio directrices claras ante el aumento progresivo de los contagios, lo que derivó en manifestaciones masivas.
Israel, con nueve millones de habitantes, registra 486 fallecidos y un total de 66.555 casos desde marzo, de los cuales más de 33.000 están actualmente activos, 315 personas en estado grave y 96 con asistencia respiratoria.