El cargo lo asume el cardiólogo Marcelo Queiroga, quien reemplazará a Eduardo Pazuello, un general del Ejército en servicio activo sin título médico, que fue criticado por carecer de experiencia en salud pública y apoyar la iniciativa del mandatario brasileño de usar medicamentos no probados para combatir el Covid-19.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este lunes que nombrará al cardiólogo Marcelo Queiroga como ministro de Salud, el cuarto en ocupar el cargo durante la pandemia, en momentos en que el sistema sanitario está al borde del colapso por el coronavirus, que deja casi 280.000 muertos.
Tenés que leerUna médica rechazó ser la nueva ministra de Salud de Brasil tras recibir amenazas de muerte“Fue decidido ahora en la tarde designar al médico Marcelo Queiroga para el ministerio de Salud”, dijo Bolsonaro en un breve encuentro con sus simpatizantes en el palacio presidencial de Alvorada. El proceso de transición “debe tomar una o dos semanas”, agregó.
Bolsonaro afirmó a periodistas que Queiroga seguiría la agenda del ministro saliente, Eduardo Pazuello en la cartera y que redoblarían los esfuerzos para una masiva vacunación contra el coronavirus. Agregó que la transición se completaría en una o dos semanas.
Pazuello, un general del Ejército en servicio activo sin título médico, fue criticado por carecer de experiencia en salud pública y apoyar la iniciativa de Bolsonaro de usar medicamentos no probados para combatir el Covid-19, al tiempo que minimizaba la necesidad de distanciamiento social.
Los dos predecesores de Pazuello renunciaron el año pasado, en parte porque, como médicos, no respaldaban por completo el tratamiento de pacientes con coronavirus con el fármaco antipalúdico hidroxicloroquina.
Pazuello amplió el acceso a la hidroxicloroquina, que no está comprobada como tratamiento para el Covid-19, y permitió que se prescriba a prácticamente cualquier persona que dé positivo por el nuevo coronavirus.
Su incapacidad, además, para asegurar el suministro oportuno de vacunas para el país ha llevado a que se solicite una investigación en el Congreso.