Japón vive este miércoles su primer día bajo estado de alerta sanitaria por la pandemia de coronavirus, una medida que ha causado el cierre de numerosos comercios y espacios de ocio aunque no impide que muchas personas sigan desplazándose a trabajar.
Las calles de Tokio amanecieron hoy con un ajetreo de "salaryman" (oficinistas) visiblemente inferior al habitual, al igual que la red de transporte público que diariamente emplean millones de personas en la megalópolis nipona, una de las siete regiones del país a las que afecta este este recurso legislativo, denominado legalmente estado de emergencia en Japón.