Decenas de líderes mundiales están reunidos en Jerusalén el jueves para participar en un encuentro centrado en la conmemoración del Holocausto y en la lucha contra el antisemitismo contemporáneo.
Decenas de líderes mundiales están reunidos en Jerusalén el jueves para participar en un encuentro centrado en la conmemoración del Holocausto y en la lucha contra el antisemitismo contemporáneo.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin; su homólogo francés, Emmanuel Macron; el príncipe Carlos de Inglaterra; el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y los presidentes de Alemania, Italia, Austria y Argentina, estaban entre los más de 40 mandatarios que asistieron al Foro Mundial sobre el Holocausto, que coincidió con el 75 aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz.
La ceremonia de tres horas en el museo del Holocausto Yad Vashem de Jerusalén, llamado “Recordando el Holocausto: Luchando contra el Antisemitismo”, busca proyectar un frente unido para recordar el genocidio de los judíos europeos ante el repunte de la violencia antisemita tanto en el continente como en el resto del mundo.
En la víspera del encuentro, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, pidió a los líderes mundiales que asistieron a una cena en su residencia oficial que “dejen la historia a los historiadores”. Y destacó: "Nos reuniremos en Yad Vashem para recordar y asegurarnos de que nunca más vuelva a ocurrir. Yad Vashem es un instituto líder para la investigación y educación sobre el Holocausto conducido por historiadores. El papel de los líderes políticos es dar forma al futuro”. También, remarcó que la reunión “es una expresión de nuestro compromiso compartido para transmitir los hechos históricos y las lecciones del Holocausto a la próxima generación”.
El evento es uno de los mayores actos políticos en la historia de Israel. Más de 10.000 agentes de policía custodiaban Jerusalén y las principales carreteras, y grandes partes de la ciudad estaban cerradas antes del evento.
Desde 1963, Yad Vashem se ha propuesto dar testimonio del reconocimiento del Estado de Israel a los que han salvado a los judíos de las garras de los nazis, poniendo en peligro sus propias vidas. Estos héroes reciben el título de “Justo entre las naciones” y sus nombres, más de 40.000 en 2019, están inscritos en muros de piedra en el bosque adyacente al memorial, rodeados de árboles plantados en su recuerdo. La otra misión del museo es la búsqueda de nombres de todas las víctimas del Holocausto.