El presidente de Brasil, Lula da Silva se someterá a un nuevo procedimiento para interrumpir el flujo de sangre en una región de su cerebro y evitar nuevos sangrados como el que sufrió esta semana.
Se encuentra "lúcido, orientado, conversando y pasó la noche bien", aseguran desde el hospital. Lula fue sometido hace dos días a una craniectomía para drenaje de hematoma, la cual fue exitosa.
El presidente de Brasil, Lula da Silva se someterá a un nuevo procedimiento para interrumpir el flujo de sangre en una región de su cerebro y evitar nuevos sangrados como el que sufrió esta semana.
El procedimiento está programado para la mañana del jueves 12. Según la prensa local, el mandatario "se someterá a una embolización de la arteria meníngea media, que irriga la duramadre, la capa más externa de las meninges que envuelven el sistema nervioso central. El sangrado y el hematoma que se formó, están localizados entre la membrana y el cerebro".
Folha do Sao Paulo indicó que "la técnica se utiliza en el tratamiento de los hematomas subdurales crónicos, que se forman con la acumulación de sangre entre el cerebro y el hueso del cráneo, tal como ocurrió con el presidente. La embolización interrumpe el flujo de sangre en el área deseada, evitando la aparición de nuevos hematomas".
Se considera un procedimiento mínimamente invasivo y se recomienda para pacientes neurológicamente estables. Mediante un catéter, el cirujano inyecta un material que obstruye la arteria y bloquea el flujo sanguíneo. Se espera que, con este procedimiento, no se repitan nuevos sangrados, minimizando los riesgos para Lula.
"El Presidente Luiz Inácio Lula da Silva permanece bajo cuidados intensivos en el Hospital Sirio-Libanês, en São Paulo. Pasó el día bien, sin complicaciones, realizó fisioterapia, caminó y recibió visitas de familiares", arranca el último parte médico divulgado.
Y sigue: "Como parte del plan terapéutico, se realizará la complementación de la cirugía con un procedimiento endovascular (embolización de la arteria meníngea media) mañana por la mañana. Otras actualizaciones serán brindadas durante la rueda de prensa que se realizará mañana a las 10 horas. El Presidente sigue bajo el seguimiento del equipo médico, bajo los cuidados del Prof. Dr. Roberto Kalil Filho y la Dra. Ana Helena Germoglio".
El presidente experimentó fuertes dolores de cabeza la noche del lunes (9) y, después de realizarse exámenes en el hospital Sirio-Libanês en Brasilia, fue transferido a la unidad de São Paulo para una cirugía de emergencia. Tras el procedimiento, fue trasladado a la UCI, donde permanece en observación.
Según un boletín emitido a finales de la mañana, el presidente se encuentra "lúcido, orientado, conversando y pasó la noche bien". El texto añadió que el líder del PT sigue con un drenaje en el cerebro y espera realizar nuevos exámenes durante el día.
Lula fue sometido hace dos días a una craniectomía para drenaje de hematoma, la cual fue exitosa, según el boletín médico divulgado por la institución. El presidente fue atendido por los médicos Roberto Kalil Filho y el neurocirujano Marcos Stavale, y actualmente está bajo el cuidado de la infectóloga Ana Helena Germoglio.
El presidente comenzó a sentirse mal por la tarde, cuando se quejó de dolor de cabeza y somnolencia a los ministros con los que estaba trabajando. Su último compromiso fue una reunión con el presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira (PP-AL), y el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco (PSD-MG). Iba a realizarse exámenes solo en la mañana del martes (10), pero los dolores adelantaron su ingreso al hospital. La primera dama, Rosângela da Silva, conocida como Janja, lo acompañó en todo momento.