El presidente de Francia, Emmanuel Macron, afirmó este lunes que espera "una desescalada" de la crisis en torno a Ucrania y pidió ser "extremadamente responsable", durante un encuentro en Moscú con su homólogo de Rusia, Vladimir Putin. Paralelamente, continúan en aumento las tensiones entre los países occidentales y Rusia por el conflicto en la frontera ruso-ucraniana.
La visita de Macron a Moscú llegó en momentos en que Rusia es acusada de haber desplegado decenas de miles de soldados en la frontera ucraniana en vistas a una invasión. Rusia rechaza esas sospechas y defiende el derecho a mover fuerzas dentro de su propio territorio según lo estime conveniente.
Además, el Kremlin insta a Estados Unidos y sus aliados a impedir que Ucrania y otras naciones exsoviéticas se unan a la OTAN, detener los despliegues de armas allí y hacer retroceder a las fuerzas de la OTAN en Europa del Este. "La discusión de estos temas puede iniciar una desescalada, a donde queremos ir", declaró Macron al comienzo de su reunión con Putin, en un claro intento por intensificar los esfuerzos para frenar una guerra entre Rusia y Ucrania.
En ese sentido, agregó querer "empezar a construir una respuesta útil de manera colectiva para Rusia y para todo el resto de Europa", informó la agencia de noticias AFP. Esta "respuesta útil" debe "evitar la guerra" entre Rusia y Ucrania y "construir elementos de confianza, de estabilidad, de visibilidad para todo el mundo", precisó el presidente francés.
Macron tildó de "crítica" la situación actual en Europa y alegó que había que "ser extremadamente responsable". En la misma línea, alabó el diálogo realizado desde 2019 con Rusia, consideró que era "necesario porque es el único que permite construir una verdadera seguridad y estabilidad para el continente europeo".
Los líderes de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania se reunieron por última vez en París en diciembre de 2019 en la llamada "Cumbre del Formato de Normandía", pero no lograron resolver los principales problemas conflictivos. Por su parte, el mandatario ruso agradeció los esfuerzos de Francia para "resolver el tema de la seguridad en Europa" y específicamente para encontrar una "solución a la crisis" en Ucrania.
Putin cree que Rusia y Francia tienen "preocupaciones comunes en cuanto a la seguridad en Europa". Los dos líderes concretaron su encuentro en el Kremlin sentados de un lado y de otro de una mesa blanca, un formato que Putin adoptó recientemente durante sus encuentros con líderes extranjeros por la pandemia. Macron es el primer líder occidental de alto perfil que se reúne con el presidente ruso desde el aumento de las crispaciones en diciembre último, y mañana se reunirá con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
Biden recibió a Scholz en la Casa Blanca
El presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió que Estados Unidos y Alemania "actúan al unísono" frente a las "agresiones" de Rusia en Europa. Lo hizo en el marco de una reunión presencial que mantuvo en la Casa Blanca con el jefe de Gobierno alemán, el canciller Olaf Scholz, mientras la presión entre los países occidentales y Rusia continúa en aumento por el conflicto en la frontera ruso-ucraniana. Este primer encuentro cara a cara de Scholz y Biden desde que el socialdemócrata llegó al poder en Alemania, hace dos meses, llegó en momentos en que el líder europeo es criticado por los miembros de la OTAN por falta de una línea clara frente a Rusia, que es acusada de haber desplegado decenas de miles de soldados en la frontera ucraniana en vistas a una invasión. Al inicio de la reunión, Biden manifestó que Estados Unidos y Alemania "trabajan al unísono para disuadir aún más la agresión rusa en Europa", sin dejar de agregar que también lo hacen "para hacer frente a los desafíos que presenta China y promover la estabilidad en los Balcanes Occidentales", así como en la respuesta a la pandemia y la crisis climática. De acuerdo con el mandatario estadounidense, Alemania es "uno de los más estrechos aliados" de Estados Unidos. Sin embargo, algunas voces consideran que Scholz es demasiado complaciente ante el riesgo de un ataque ruso a Ucrania. El líder alemán, por su parte, marcó su posición ante las críticas recibidas recientemente y ratificó la declaración de Biden. "Somos aliados cercanos y estamos trabajando intensamente juntos. Esto es necesario para dar los pasos que tenemos que dar, por ejemplo, luchar contra la agresión rusa contra Ucrania", precisó. Según la Casa Blanca, Biden y Scholz tenían previsto abordar la preparación de un "robusto paquete de sanciones" que "impondrían un grave coste si Rusia invade Ucrania".
Preocupación por Nord Stream 2
Uno de los temas de conversación entre las potencias de Occidente es el del futuro gasoducto Nord Stream 2. Este ducto transporta gas natural ruso a través del mar Báltico directamente a Europa Occidental, pero esquivando Ucrania. Actualmente, su funcionamiento se encuentra bloqueado por falta de certificación. Si Rusia invade Ucrania, "Nord Stream 2 no comenzará el bombeo de gas", anticipó una alta funcionaria estadounidense durante una conferencia de prensa telefónica. Poco antes de viajar a Estados Unidos, sin embargo, el canciller alemán Olaf Scholz rehusó hacer referencia explícita a una posible suspensión de los permisos del Nord Stream 2, aunque destacó que el potencial castigo sería "de amplio alcance y muy duro".
Recompensa por paradero de líder yihadista
El gobierno de Estados Unidos ofreció una importante recompensa, de hasta 10 millones de dólares, por información para identificar o ubicar a Sanaullah Ghafari, el líder de Estado Islámico-Khorasan (EI-K). Se trata de la rama afgana del grupo yihadista Estado Islámico (EI), fracción que reivindicó un atentado en el aeropuerto de Afganistán que dejó cientos de muertos durante la retirada estadounidense del año pasado. "Ghafari es responsable de aprobar todas las operaciones de EI-K en todo Afganistán y de organizar los fondos para llevar a cabo las operaciones", anunció en un comunicado el Departamento de Estado, y presentó una recompensa millonaria para obtener más información sobre él. Esta suma será también para quien aporte cualquier dato que ayude a arrestar o condenar a los responsables del "ataque terrorista al aeropuerto de Kabul" de agosto de 2021, una acción reivindicada por el EI-K que dejó más de un centenar de muertos, entre ellos 13 soldados estadounidenses, informó la agencia de noticias AFP. El ataque tuvo lugar cuando Estados Unidos llevaba adelante su caótica retirada de Afganistán y la evacuación de los afganos que huían tras la toma del poder por parte de los talibanes. Según Washington, Ghafari, también conocido como Shahab al Muhajir, fue nombrado jefe de EI-K en junio de 2020. En noviembre, Ghafari fue incluido en la lista negra estadounidense de terroristas extranjeros. El EI-K fue responsable de algunos de los ataques más mortíferos en la región en los últimos años, masacrando a civiles en Afganistán y Pakistán, en mezquitas, santuarios, plazas públicas y hospitales. Aunque los dos son grupos islamistas radicales sunnitas, los talibanes y el EI-K mantienen una profunda enemistad. El grupo yihadista fue duramente golpeado en Afganistán tanto por los talibanes como por las fuerzas lideradas por Estados Unidos y estaba perdiendo influencia, pero sus ataques se intensificaron desde que los talibanes llegó al poder.