Cerca de 500.000 personas murieron en diez años de guerra en Siria, asegura el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), en un nuevo balance que incluye más de 100.000 nuevos decesos confirmados por la ONG.
La inmensa mayoría de los fallecidos se produjeron entre finales de 2012 y finales de 2015.
Cerca de 500.000 personas murieron en diez años de guerra en Siria, asegura el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), en un nuevo balance que incluye más de 100.000 nuevos decesos confirmados por la ONG.
Casi medio millón de personas murieron en la última década en Siria desde el inicio de la revolución de 2011, que derivó en una cruenta guerra que ha devastado el país y a su población, según el último balance del OSDH.
Según ha podido documentar la ONG, con sede en Londres pero con una amplia red de colaboradores sobre el terreno, al menos 494.438 personas han perdido la vida, 159.774 de las cuales fueron víctimas civiles, desde el 15 de marzo de 2011, cuando dio comienzo la revolución, hasta el pasado 30 de mayo.
La inmensa mayoría de los fallecidos que la organización ha podido confirmar se produjeron entre "finales de 2012 y finales de 2015", dijo a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.