En México se abrió la posibilidad de despenalizar el aborto a nivel nacional, gracias a una decisión tomada por la primera sala de la Suprema Corte de México.
La Corte Suprema señaló que penalizar la interrupción del embarazo atenta contra los derechos de la mujer.
En México se abrió la posibilidad de despenalizar el aborto a nivel nacional, gracias a una decisión tomada por la primera sala de la Suprema Corte de México.
Esta determinación establece que las mujeres tienen el derecho de impugnar las leyes estatales que castigan la práctica del aborto, argumentando que estas normas locales violan sus derechos.
La Corte Suprema emitió un comunicado en el que afirmaba que "el simple hecho de ser mujer o de tener la capacidad de gestar es suficiente para que se pueda impugnar, a través de un juicio de amparo, la inconstitucionalidad de los artículos que penalizan el aborto".
Hasta ahora, el aborto voluntario fue despenalizado en 11 de los 32 estados que conforman México. La Ciudad de México fue la primera jurisdicción en América Latina en autorizarlo en 2007, y la mayoría de los estados permiten el aborto hasta las 12 semanas de gestación.
Con esta decisión, las mujeres que viven en estados donde el aborto aún es castigado, independientemente de si están embarazadas o necesitan someterse a este procedimiento, podrán presentar recursos legales de forma individual. Esto, en la práctica, autoriza el aborto a nivel nacional.
El comunicado de la Corte señaló que penalizar la interrupción del embarazo atenta contra los derechos de la mujer, incluyendo el derecho a la autonomía reproductiva, a la vida, a la no discriminación, a la salud y a la integridad personal.
El ministro Jorge Pardo, quien impulsó este proyecto, declaró que resultaba "indignante" que las mujeres fueran perseguidas penalmente por decidir sobre sus propios cuerpos.
En 2016, la máxima corte rechazó otro proyecto que buscaba declarar inconstitucionales los artículos del código penal federal que castigan el aborto, lo que hubiera llevado a su despenalización en todo el país.
Aunque se reconoce que algunos estados han legalizado el aborto, tanto organizaciones civiles como la propia Suprema Corte señalan que no se dieron los pasos necesarios en todos los estados para garantizar el acceso a este procedimiento en instituciones de salud pública.
Según datos oficiales, en México el método más comúnmente utilizado para inducir el aborto antes de las 12 semanas es el uso de píldoras.
Varias organizaciones civiles han creado una red para proporcionar estos medicamentos a mujeres en todo México e incluso en Estados Unidos, donde varios estados han prohibido o restringido el aborto, después de que en 2022 la Corte Suprema de Estados Unidos revocara un fallo de 1973 que reconocía el aborto como un derecho constitucional.