Un sacerdote santafesino que reside en Roma analizó esta mañana la decisión tomada por el Papa Benedicto XVI de apartarse del máximo cargo de la Iglesia Católica desde el próximo 28 de febrero.
El padre Horacio Simián Yofre, que se desempeñó en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma, expresó durante una entrevista radial por LT10 que “los desafíos van a comenzar a verse cuando el nuevo papa esté en funciones. Ahora, es prematuro hacer previsiones. Los desafíos prematuros de la Iglesia son la clarificación de la doctrina y el aspecto pastoral. En este el Papa es clave porque pone los acentos. Por ejemplo, Juan Pablo II estaba interesado en el aspecto que la Iglesia presentaba delante del pueblo de Dios. Por este motivo, visitó tantos países, de una manera tan cordial. Él quería que la Iglesia llegara a la gente y lo consiguió”.
Sobre el celibato y las denuncias de abusos sexuales, el sacerdote santafesino sostuvo que “el problema del celibato es uno de los problemas menores. Esta es una cuestión que no toca ni la doctrina, ni las cuestiones fundamentales de la Iglesia. Si se viera que terminar con el celibato ayuda más al acercamiento con la gente, se puede tomar una decisión. Y sobre los abusos sexuales, ya se habló demasiado. Se cometieron errores y se buscó a los responsables. Este no es un problema estructural de la Iglesia”.
Consultado sobre si el próximo Papa puede ser latinoamericano, Horacio Simián Yofre opinó que “yo pienso que estamos lejos todavía. En este momento yo no sé si hoy hay una persona en Latinoamérica preparada para convertirse en Papa. Hace algunos años Bergoglio si estaba preparado” (LT10).