Mientras aumenta la presión sobre la industria farmacéutica para fabricar medicamentos en el continente africano, la compañía estadounidense Moderna anunció que pronto comenzaría el proceso de decidir el país y la ubicación de su nueva fábrica, que produciría hasta 500 millones de dosis de vacunas ARNm cada año.
El sitio también incluirá capacidades de envasado y embotellado, aseguró la empresa en un comunicado. "Esperamos fabricar nuestra vacuna contra COVID-19, así como productos adicionales dentro de nuestra cartera de vacunas de ARNm en esta instalación", cita el comunicado al director ejecutivo Stephane Bancel.
La medida se anuncia en medio del debate, entre los fabricantes de medicamentos y los gobiernos, sobre la renuncia a los derechos de propiedad intelectual de las vacunas contra COVID-19.
La renuncia, insisten susdefensores, ayudaría a poner fin a la pandemia y dar acceso a las vacunas a más países en desarrollo, después de que las naciones ricas compraran la mayor parte del suministro de este año.
Tenés que leerSe autorizó la aplicación de la vacuna de Moderna para mayores de 12 añosY aunque Estados Unidos ha dicho que apoyaría una decisión de este tipo, la idea se ha enfrentado a la oposición de las empresas farmacéuticas. Su argumento: deben supervisar cualquier transferencia de tecnología, debido a la complejidad del proceso de fabricación.
Transferencia de tecnología
Pfizer y su socio BioNTech llegaron a un acuerdo en julio para que Biovac, de Sudáfrica, ayude a producir alrededor de 100 millones de dosis al año de su vacuna contra COVID-19 para África.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estado tratando de persuadir a Moderna y Pfizer-BioNTech de unir fuerzas y sumarse a su plan para alistar un centro de transferencia de tecnología en África. Pero un alto funcionario de la OMS confesó el mes pasado a la agencia británica de noticias Reuters que no había habido mucho progreso en las conversaciones con Moderna.