La muerte del general iraní Qasem Soleimani en un bombardeo en la madrugada de este viernes en el aeropuerto de Bagdad ordenado por el presidente estadounidense, Donald Trump, provocó una cascada de reacciones en la comunidad internacional.
La muerte del general iraní Qasem Soleimani en un bombardeo en la madrugada de este viernes en el aeropuerto de Bagdad ordenado por el presidente estadounidense, Donald Trump, provocó una cascada de reacciones en la comunidad internacional.
Irán pide una "dura venganza", Irak considera que se trata de una "violación flagrante" de su soberanía, el Reino Unido solicita "rebajar la tensión" y el líder chií de los iraquíes reclama "moderación y sensatez".
La máxima autoridad de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, culpó del ataque en un comunicado publicado por medios oficiales persas a la "gente más cruel de la tierra" del asesinato del "honorable" comandante que "luchó valientemente durante años contra los males y los bandidos del mundo".
"Su fallecimiento no detendrá su misión, pero los criminales que han manchado sus manos con la sangre del general Soleimani y de otros mártires deben esperar una dura venganza", agregó el líder, que declaró tres días de luto en el país. "Amigos y enemigos saben que la yihad de resistencia continuará con más motivación y que la victoria definitiva espera a los combatientes en esta bendecida senda", zanja el ayatolá.
Irán convocó este viernes a un responsable de la Embajada de Suiza, que representa los intereses de Estados Unidos en Teherán a falta de relaciones diplomáticas entre los dos países.
El presidente iraní, Hasan Rohani, prevé también represalias por la muerte del general: "Sin duda, la gran nación de Irán y otras naciones libres de la región se vengarán por este horrible crimen del criminal Estados Unidos". Para el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, el bombardeo supone una "escalada extremadamente peligrosa e imprudente".
Reacción iraquí
El líder espiritual chií de Irak, el gran ayatola Ali Sistani, condenó el ataque, pero también pidió contención a los implicados. “El brutal ataque es una violación insolente de la soberanía iraquí y de los acuerdos internacionales. Mató a varios comandantes que derrotaron a terroristas del Estado Islámico”, explica Sistani en un comunicado. “El país se dirige a tiempos difíciles. Pido a todas las partes implicadas que se comporten con moderación y actúen con sensatez”, concluye el líder.
El primer ministro saliente de Irak, Adel Abdelmahdi, subrayó que el ataque representa "una escalada peligrosa que enciende una guerra destructiva en Irak, en la región y en el mundo". En un comunicado aseguró que "llevar a cabo operaciones de ajuste de cuentas contra figuras de liderazgo iraquíes y de un país hermano en suelo iraquí constituye una violación flagrante de la soberanía iraquí y un ataque a la dignidad del país".
La embajada de Estados Unidos en Bagdad, que el martes fue asaltada por una turba pro iraní, instó este viernes a sus ciudadanos a irse de Irak "inmediatamente".
La cancillería recomienda a los estadounidenses en Irak a irse "en avión mientras sea posible", ya que el bombardeo tuvo lugar en el aeropuerto de Bagdad, o "hacia otros países por vía terrestre". Los principales pasos fronterizos de Irak llevan a Irán y a una Siria en guerra, aunque también hay otros pasos hacia Arabia Saudita y Turquía.
"Condolencias al pueblo iraní"
Para Rusia, el bombardeo "conducirá a un aumento de la tensión en toda la región", según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores del país en un comunicado. "Soleimani se dedicó a defender los intereses nacionales de Irán", expresa la nota oficial, que ofrece sus "sinceras condolencias al pueblo iraní".
El ministro británico de Exteriores, Dominic Raab, pidió rebajar la tensión: "Siempre hemos reconocido la amenaza agresiva que suponía la fuerza Quds iraní liderada por Qasem Soleimani. Tras su muerte, pido a todas las partes rebajar la tensión. Un conflicto mayor no es de nuestro interés", ha señalado Raab en un breve comunicado.
El líder del partido-milicia libanés Hezbolá, Hasan Nasralá, prometió venganza, y aseguró que completarán "el camino del comandante Soleimani".
"Trabajaremos día y noche para conseguir sus objetivos", afirmó el líder en el canal de televisión libanés Al Manar, portavoz de Hizbulá. "Vengar a los asesinos de los combatientes será la responsabilidad y el trabajo de todos en la resistencia",
La presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, denunció en un comunicado que la operación no había sido autorizada y se llevó a cabo "sin consultar al Congreso".
La líder demócrata en el Congreso sostuvo que la principal prioridad del Gobierno debe ser "proteger las vidas e intereses de los estadounidenses". "El ataque aéreo de esta noche amenaza con provocar una peligrosa escalada de violencia", ha advertido, para subrayar que "Estados Unidos, y el mundo, no pueden permitirse que las tensiones aumenten hasta el punto de no retorno".