Yemen puede sufrir una hambruna de proporciones masivas si Estados Unidos no "revierte" su decisión de clasificar a los rebeldes hutíes como "terroristas", alertó este jueves un alto funcionario de la ONU al Consejo de Seguridad de ese organismo multilateral.
El secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia de la ONU, el británico Mark Lowcock, pidió a Estados Unidos “revertir la decisión” de incluir al grupo rebelde de Yemen en la lista de organizaciones terroristas para evitar una peor crisis humanitaria en ese empobrecido y bloqueado país.
Lowcock además advirtió que las exenciones prometidas por Washington para las ONG que distribuyen ayuda humanitaria no evitarán la inminente amenaza de una hambruna, inédita en los últimos 40 años, informó la agencia de noticias AFP.
En una de sus últimas decisiones en materia de política internacional, el Gobierno saliente de Donald Trump anunció el domingo pasado que incluirá a los rebeldes hutíes de Yemen en su lista negra de grupos “terroristas”
Esta designación -realizada a diez días de entregar el mando al demócrata Joe Biden y aplaudida por la vecina Arabia Saudita que combate a estos rebeldes yemeníes- tendrá que ser aprobada por el Congreso estadounidense el martes próximo.
Además de bloquear el flujo de la ayuda humanitaria, de la cual depende el 80% de la población yemení tras más de cinco años de guerra, la decisión de Estados Unidos obstaculizará las negociaciones políticas para resolver el conflicto, advirtieron hoy funcionarios de Naciones Unidas durante una videoconferencia del Consejo de Seguridad.
La iniciativa anunciada el domingo por el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, fue fuertemente criticada por la Unión Europea (UE) y diversas ONG.
Asimismo, los congresistas demócratas pidieron a Biden que revoque la decisión en cuanto asuma el Gobierno.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, también espera que Estados Unidos revoque su decisión, según afirmó su portavoz Stéphane Dujarric.
Es poco común que la ONU, generalmente cautelosa en sus declaraciones sobre Estados Unidos, su mayor contribuyente financiero, critique de manera tan clara y enérgica una decisión del gobierno saliente.
Ante el Consejo de Seguridad, el enviado de la ONU para Yemen, Martin Griffiths, afirmó que "comparte fuertemente" la posición de Lowcock "según la cual la decisión contribuiría a la hambruna en Yemen", por lo que "debe ser revocada lo antes posible por razones humanitarias".
"La prioridad más urgente en Yemen ahora es prevenir una hambruna generalizada", insistió Lowcock.
Lowcock alertó que las proyecciones para 2021 del organismo muestran que 16 millones de personas pasarán hambre, si se vuelve imposible entregar alimentos y ayuda humanitaria en las zonas controladas por los rebeldes hutíes.
La posición fue compartida por el estadounidense David Beasley, jefe del Programa Mundial de Alimentos (PMA, premio Nobel de la Paz 2020), quien habló de la "catastrófica" decisión estadounidense.
"¿Qué creen que les va a pasar a los 5 millones de personas que están ahora en clasificación de emergencia? Van a caer en condiciones de hambruna", dijo y agregó: “Literalmente será una sentencia de muerte para cientos de miles, si no millones, de personas inocentes."+