Sábado 6.11.2021
/Última actualización 17:27
La Oficina para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) expresó hoy su "preocupación" por la militarización de provincias del sur de Chile, y exigió una investigación "rápida y rigurosa" sobre la represión en la que murió un comunero mapuche.
"Los Estados deben limitar al máximo el uso de las Fuerzas Armadas para el control del orden público, dado que el entrenamiento que reciben no está dirigido a la protección y control de civiles, ni a la gestión de manifestaciones", afirmó el titular de la oficina de ONU Derechos Humanos para América del Sur, Jan Jarab.
El funcionario, además, reclamó una investigación "rápida, exhaustiva, rigurosa y eficaz" de la represión en la que murió el comunero mapuche Jordan Llempi Machacan, de 23 años, y fueron heridas otras tres personas, una menor de edad, por disparos en medio de operativos policiales y de Fuerzas Armadas.
Para explicar los hechos, el presidente Sebastián Piñera dijo que patrullas policiales acompañadas por "efectivos de la Armada y del Ejército fueron emboscadas y atacadas" por un "grupo terrorista" con armas de fuego, "algunas de grueso calibre" en una ruta que había sido bloqueada.
El hecho fue el miércoles en una localidad ubicada en una de las cuatro provincias militarizadas de las regiones de Biobío y La Araucanía, a unos 600 kilómetros al sur de Santiago, que están bajo estado de excepción desde el 12 de octubre y hasta el jueves próximo, aunque Piñera pidió al Congreso extender la medida.
La versión oficial de un ataque armado se choca con testimonios de heridos y testigos que, citados por la agencia de noticias AFP, aseguraron que los militares dispararon contra los vehículos que esperaban ante el bloqueo de la ruta.
La violencia en la región creció en la última década a medida que se agudizaba el conflicto por la propiedad de tierras, que los pueblos originarios consideran propias por derecho ancestral.