Miércoles 12.2.2020
/Última actualización 11:44
En un artículo publicado este miércoles por el director editorial de la comunicación del Vaticano, Andrea Tornielli, se asegura que Francisco, “después de haber orado y meditado, ha decidido responder no previendo cambios o nuevas posibilidades de excepciones a las ya previstas por la disciplina eclesiástica vigente, sino pidiendo volver a empezar desde lo esencial”,
Aunque en su editorial explica que la ordenación de hombres casados "es una cuestión que ha sido discutida durante mucho tiempo y puede serlo aun en el futuro, porque “la perfecta y perpetua continencia” no es “ciertamente exigida por la naturaleza misma del sacerdocio”, como declaró el Concilio Ecuménico Vaticano II.
Francisco tampoco abre a la creación de las diaconisas, mujeres que pueden impartir algunos sacramentos, y lo justifica afirmando que es reductivo pensar que “se otorgaría a las mujeres un estatus y una participación mayor en la Iglesia sólo si se les diera acceso al orden sagrado”.
“Pero esta mirada en realidad limitaría las perspectivas, nos orientaría a clericalizar a las mujeres, disminuiría el gran valor de lo que ellas ya han dado y provocaría sutilmente un empobrecimiento de su aporte indispensable”, explica el papa argentino.
Aunque, el papa sí que exhorta a “estimular el surgimiento de otros servicios y carismas femeninos, que respondan a las necesidades específicas de los pueblos amazónicos en este momento histórico”, pero “que no requieran” la ordenación.