La Iglesia de Italia comenzó a distribuir este jueves los nuevos misales romanos con los cambios al Padre Nuestro en idioma italiano introducidos por el papa Francisco en mayo pasado.
Se formalizaron las modificaciones en la oración que el sumo pontífice argentino aprobó en mayo pasado.
La Iglesia de Italia comenzó a distribuir este jueves los nuevos misales romanos con los cambios al Padre Nuestro en idioma italiano introducidos por el papa Francisco en mayo pasado.
La nueva traducción de la tradicional oración religiosa fue autorizada por el pontífice en mayo pasado, tras la aprobación que había obtenido en noviembre por parte de la asamblea general de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI).
Así, la tercera edición del Misal Romano de Pablo VI sustituye la frase "non ci indurre in tentazione" ("no nos induzcas a la tentación", en español) por "non abbandonarci alla tentazione" (o "no nos abandones a la tentación").
La nueva fraseología había sido defendida públicamente por Jorge Bergoglio por lo menos desde el 7 de diciembre de 2017, cuando aseguró que Dios no puede inducir a los hombres a la tentación y que por ello era más adecuado utilizar una frase similar a "no nos dejes caer en la tentación".
"En la oración del Padre Nuestro, que Dios nos induzca en tentación no es una buena traducción. También los franceses han cambiado el texto con una traducción que dice: 'no nos dejes caer en la tentación'. Soy yo quien cae, no Dios quien me arroja", sostuvo entonces en un programa de la TV italiana dedicado a la religión.
Así, la versión italiana de la oración se empareja con el rezo tradicional en español, que dice "no nos dejes caer en la tentación".
El cambio en la versión italiana adelantado por el cardenal Gualterio Basetti podría desembocar en modificaciones en las versiones en otras lenguas que siguen ese idioma, como el inglés, aunque las primeras versiones periodísticas mostraron este jueves un rechazo a la modificación del texto anglosajón.
Con información de Télam