El Papa Francisco tuvo que cancelar varias actividadaes durante los últimos días frente a un fuerte dolor en su rodilla derecha.
El Papa Francisco tuvo que cancelar varias actividadaes durante los últimos días frente a un fuerte dolor en su rodilla derecha.
“No puedo caminar, me lo pidió el médico”, explicó el pontífice a distintos fieles que se acercaban a saludarlo, encendiendo la preocupación.
“Después los voy a saludar, pero hay un problema: esta pierna no va bien, no funciona, y el médico me ha dicho que no camine. A mí me gusta caminar, pero esta vez debo obedecer al médico”, dijo Francisco a los fieles llegados de Eslovaquia que lo esperaban en el Aula Paulo VI.
Además, agregó: “Les pido el sacrificio de subir las escaleras y los saludo aquí, sentado. Es una humillación, pero la ofrezco por su país”. Y finalizó: “Rezo por ustedes, por sus familias, por su noble pueblo. Adelante y coraje. Y les pido por favor que recen por mí”.
A sus 85 años, el pontífice sufre una dolencia en su rodilla derecha desde las primeras semanas del año.
El 25 de febrero, El Vaticano confirmó que padecía una gonalgia aguda, una afección de tipo reumático. Entonces se le recomendó más reposo y el Papa tuvo que suspender un viaje a Florencia, además de no poder asistir al Miércoles de Ceniza