El Papa Francisco le ordenó al arzobispo Georg Gaenswein, antiguo secretario privado y asistente del difunto Papa Benedicto XVI, que regrese a su país natal, Alemania, a finales de este mes sin recibir ninguna nueva asignación.
Georg Gaenswein mantuvo varias reuniones para discutir su futuro, luego de que el sumo pontífice lo dejara de lado tras una pelea.
El Papa Francisco le ordenó al arzobispo Georg Gaenswein, antiguo secretario privado y asistente del difunto Papa Benedicto XVI, que regrese a su país natal, Alemania, a finales de este mes sin recibir ninguna nueva asignación.
Con esta declaración, el Vaticano pone fin a las especulaciones sobre el papel que desempeñará Gaenswein, una figura influyente en el Vaticano durante más de una década, antes de que el sumo pontífice lo apartara después de un conflicto personal.
El ex Papa Benedicto falleció el 31 de diciembre, casi una década después de su renuncia en 2013, convirtiéndose en el primer pontífice en hacerlo en 600 años.
La situación del arzobispo es inusual, ya que con 66 años y un rango relativamente joven, resulta excepcional que no se le asigne ninguna responsabilidad, lo que da la sensación de un destierro por parte del Papa.
El comunicado emitido por el Vaticano, que consta de dos líneas, señala que Francisco "ha dispuesto" que Gaenswein regrese a su diócesis de Friburgo "por el momento".
Históricamente, la mayoría de los secretarios papales eran asignados para dirigir diócesis, convertirse en cardenales o recibir otros cargos de alto perfil. Gaenswein aún tiene nueve años para alcanzar la edad de jubilación normal de 75 años para los obispos.
Cabe mencionar que, en los últimos meses, se reunió varias veces con Francisco para discutir su futuro, y hubo especulaciones en los medios católicos sobre la posibilidad de que obtuviera un puesto diplomático como nuncio o embajador en algún país.
Su pasado está marcado por haber sido el secretario personal de Benedicto XVI desde 2003, cuando el entonces cardenal Joseph Ratzinger asumió ese cargo, y permaneció a su lado durante casi 20 años, incluso después de la renuncia de Benedicto XVI.
En su libro titulado "Nada más que la verdad: mi vida junto a Benedicto XVI", que fue enviado a los periodistas por su editor pocas horas después del entierro de Benedicto XVI el 5 de enero, Gaenswein causó revuelo en el Vaticano al describir las tensiones que existían mientras dos hombres vestidos de blanco vivían dentro de sus muros.
En 2020, Gaenswein y Francisco tuvieron un desacuerdo cuando el arzobispo estuvo involucrado en un episodio complicado relacionado con el papel del ex Papa Benedicto en un libro sobre el celibato sacerdotal, el cual fue interpretado por muchos como un ataque a la autoridad del Papa argentino.