Durante la madrugada de este sábado, el Congreso peruano rechazó con 45 votos a favor, 65 en contra y dos abstenciones, el adelanto de las elecciones generales a 2023, tal como había pedido la presidenta, Dina Boluarte.
La mandataria, Dina Boluarte, solicitó el adelantamiento del proceso electoral ante la crisis que vive el país, donde se registran protestas desde hace semanas que dejaron ya al menos 48 muertos y que empiezan a afectar el abastecimiento en las provincias del sur.
Durante la madrugada de este sábado, el Congreso peruano rechazó con 45 votos a favor, 65 en contra y dos abstenciones, el adelanto de las elecciones generales a 2023, tal como había pedido la presidenta, Dina Boluarte.
El planteo de la mandataria se trató de un intento de poner fin a las protestas que sacuden al país andino desde hace siete semanas, y aunque la decisión pareciera no tener vuelta atrás, el lunes habrá una "reconsideración" de esta votación a cargo de los mismos legisladores.
"Pusimos a consideración de los ministros este proyecto de ley para adelantar a diciembre de 2023" los comicios en "fecha y hora que el Congreso diga", había afirmado durante un acto de Gobierno y reconoció que las protestas, bloqueos y la violencia con que piden su renuncia en las calles se ha agudizado.
La legisladora Susel Paredes, de centro, lamentó la falta de voluntad en el Congreso para adelantar de elecciones y criticó a los partidos de derecha como Renovación Popular y Avanza País, que se opusieron al adelanto, y de izquierda que según ella se aprovecharon para impulsar una Asamblea Constituyente.
"No veo de ninguna de las dos partes una vocación de llegar a un acuerdo y de verdad necesitamos llegar a un acuerdo, para eso estamos los congresistas. Si estamos aquí representando a las distintas posiciones políticas y a las distintas regiones del país, tenemos la obligación de ponernos de acuerdo", indicó.
En las regiones más furiosas con la destitución de Castillo, y ahora más afectadas por la caída del turismo y la escasez de productos básicos, solo quieren la renuncia de Boluarte.
El ministerio de Comercio y Turismo indicó ayer que el sector ha perdido 6,2 millones de dólares diarios por la crisis política de los últimos meses, y se han cancelado 85% de los paquetes turísticos.
La Defensoría del Pueblo cuenta 46 civiles fallecidos en los enfrentamientos y un policía, además de 10 civiles muertos en hechos vinculados a los bloqueos.
Los prolongados bloqueos generaron escasez de combustible, gas licuado de uso doméstico y algunos alimentos en regiones del sur andino y de la selva, pobres e históricamente marginados del centralismo de Lima.
Los ministerios de Defensa y del Interior anunciaron el jueves que la Policía y las Fuerzas Armadas desbloquearán las rutas del país tomadas por los manifestantes.
Mientras tanto, en el centro histórico de Lima continúan convocándose manifestaciones a las que se espera la llegada de miles de peruanos desde todo el país.