"Estamos enfrentando a un enemigo poderoso e implacable que no respeta nada, no respeta la vida de los seres humanos ni a nuestros héroes. No respeta nuestra infraestructura más básica como el Metro, actúa con una planificación profesional y sin límite", señaló el mandatario en referencia al accionar de personas encapuchadas en las manifestaciones.
Y continuó: "La democracia, la sociedad y los chilenos tenemos el deber y el derecho de defendernos del implacable enemigo".
En esa línea, Piñera sostuvo que es necesario perfeccionar las herramientas constitucionales para que "las fuerzas de orden y seguridad puedan proteger mejor a los ciudadanos y a la sociedad".
"La legislación que tenemos hoy día para combatir a los encapuchados y saqueadores no es suficiente. Requerimos leyes más severas para combatir a este poderoso e implacable enemigo y contar con la colaboración de las Fuerzas Armadas para proteger lugares críticos", agregó.
En el acto, donde se graduaron 183 hombres y 77 mujeres, el presidente chileno los incitó a "combatir esa violencia criminal, esa delincuencia sin límite que también está involucrando al narcotráfico, movimientos anárquicos, dentro del marco de la ley y del respeto de los derechos humanos".
Además, el Senado de Chile aprobó la "ley antiencapuchados", que aumenta las penas contra quienes cometan delitos durante actos públicos o actúen ocultando su identidad.
El texto indica que se debe avanzar "resueltamente en la agenda legislativa de seguridad que incluye proyectos que permitan retomar y reformar las policías, inteligencia, y fortalecer las facultades del Estado para enfrentar los saqueos, barricadas y la acción violenta de los delincuentes".
"Chile es hoy un país profundamente dividido, fracturado por la conmoción interna. Son momentos únicos en nuestra historia que, por lo mismo, requieren de soluciones excepcionales", señaló el presidente del Senado, Jaime Quintana, tras la firma del acuerdo.
Por otra parte, el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, recibió en horas de la mañana a la "Mesa de Unidad Nacional", conformada por sindicatos, gremios y organizaciones sociales, con el objetivo de "negociar" la pacificación del país.
"La palabra negociación como transacción está desacreditada. Nosotros estamos disponibles a venir y exponer las demandas del mundo social y que sean ellos los que empiecen a dar respuestas concretas y gestos concretos", señaló Mario Aguilar, presidente del Colegio de Profesores, al salir de la reunión.