Poco antes de que dos masivas explosiones destrozaran este martes una parte importante de Beirut, el Gobierno del Líbano había anunciado la vuelta a una cuarentena a partir de este miércoles, tras registrar más de 130 nuevos casos de coronavirus y ocho muertes y confirmar una nueva curva ascendente en las últimas dos semanas.
Mientras se intenta definir qué sucedió en la zona portuaria de la capital y cuántos heridos y muertos dejaron las explosiones, el país debe continuar enfrentando un importante rebrote de la pandemia que ya dejó más de 50 muertos y de 5.000 casos, según el recuento permanente de la Universidad Johns Jopkins, aunque se cree que las cifras reales deben ser mayores por la falta de testeos masivos.
Tenés que leerImpactantes videos de explosiones en Beirut: al menos 73 muertosLuego de registrar un fuerte aumento de contagios en las últimas semanas,, el Gobierno libanés volvió a imponer ayer estrictas restricciones para contener el avance de la Covid-19, una medida que estará vigente a partir de mañana y durante las próximas dos semanas.
"Tenemos que dar un paso atrás y trabajar con determinación como si la pandemia recién hubiese comenzado", manifestó el ministro de Salud, Hamid Hassan, según replicó el medio Al Jazeera.
"Tenemos que trabajar más en serio para evitar una catástrofe médica humanitaria", agregó el ministro.
Esta nueva disposición de confinamiento coincide con el feriado de Eid al-Adha, fecha en la que los musulmanes normalmente celebran grandes reuniones.
La medida incluye el cierre de lugares de culto, cines, bares, eventos deportivos y mercados, mientras que permanecerán abiertos los comercios, empresas privadas, bancos e instituciones educativas dos días a la semana.
Originalmente, el plan era que tanto el aeropuerto de Beirut como los cruces fronterizos terrestres con Siria y los puertos marítimos se mantengan operando, así como las instituciones médicas, las empresas industriales y agrícolas y las áreas críticas del Gobierno.
Sin embargo, tras la explosión en Beirut, la zona portuaria quedó destruida y el Gobierno declaró un día de duelo.
Además, quienes lleguen de países considerados de alto riesgo serán aislados por 48 horas hasta recibir los resultados del testeo, mientras que quienes lleguen de otras zonas cumplirán el confinamiento en sus domicilios.