La policía francesa desalojó por la fuerza y utilizando gas pimienta a cientos de independentistas catalanes que cortaban uno de los principales pasos fronterizos entre España y Francia, en el marco de las protestas contra las condenas a los líderes del fallido proceso de secesión de 2017 y para forzar un diálogo con el gobierno español.
El desalojo se produjo a primera hora de este martes del lado francés del paso de La Jonquera, lo que permitió despejar la vía de circulación en dirección a Francia, pero los manifestantes se movilizaron para mantener el bloqueo de la ruta del lado español.
En su intervención, los antidisturbios franceses detuvieron a 18 personas acusadas de afectar la circulación, mientras la policía catalana efectuó un arresto por atentado a la autoridad.
A pesar de la intervención policial, la plataforma Tsunami Democrático, que convocó la movilización, celebró en las redes sociales que la AP-7, principal conexión entre España y Francia, se mantenía todavía cortada más de 24 horas después del inicio de la medida de fuerza.
No obstante, poco después la policía nacional española intervino desalojando uno por uno a los últimos acampados que quedaban en la ruta, que igualmente tardará en recuperar la normalidad.
Además, Tsunami lanzó un comunicado en el que llama a bloquear esta tarde otro paso fronterizo con Francia, en Irún, en el norteño País Vasco.
"Cataluña y Euskal Herria (País Vasco) viven en un conflicto político no resuelto con el Estado español", dicen los activistas, quienes critican que el gobierno español solo responda con "imposición y represión mientras la ciudadanía lucha y reclama derechos fundamentales".
"Colapsemos la frontera, los pueblos que trabajan juntos son más fuertes", asegura el nuevo llamado de Tsunami, organización que está siendo investigada por la Audiencia Nacional de España por terrorismo.
Las autoridades desconocen quién controla Tsunami Democrático, una plataforma creada para coordinar las protestas contra la sentencia del Tribunal Supremo español contra los líderes del fallido proceso de secesión de 2017.
La primera acción Tsunami fue el bloqueo al aeropuerto internacional El Prat de Barcelona, el 14 de octubre último, el mismo día que se hizo público el fallo que impuso duras penas de entre 9 y 13 años de prisión a los líderes secesionistas.
Al iniciar ayer tres jornadas consecutivas de protestas, los independentistas afirmaron que la movilización quería ser "un grito a la comunidad internacional para que haga entender al Estado español que el único camino es sentarse a hablar".
Las protestas habían sido anunciadas para después de las elecciones generales del domingo último, que volvió a ganar el Partido Socialista (PSOE) del presidente del gobierno, Pedro Sánchez, con tres diputados menos, lo que dificultará la formación de un nuevo Ejecutivo, que puede tener que depender de los independentistas, mientras el partido de extrema derecha Vox, consiguió un histórico tercer lugar.