En una nueva jornada de protestas opositoras que alcanzaron por primera vez un acto oficial, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, abandonó las amenazas, prometió redactar una nueva Constitución y dejó abierta la puerta para nuevos comicios una vez que la Carta Magna esté lista. "Esto es lo que pasará: necesitamos adoptar una nueva Constitución, eso es lo que quieren". "Necesitamos adoptarla a través de un referéndum ya que de esta manera se aprobó la anterior", acotó.
"Bajo esta nueva Constitución se podrán realizar elecciones parlamentarias, presidenciales y locales, si eso es lo que desean", aseguró el mandatario frente a un grupo de trabajadores en huelga. La agencia estatal de Bielorrusia, Belta, agregó que el mandatario, en el poder desde 1994 y reelecto en la últimas elecciones con más del 80% (resultado denunciado como fraudulento por la oposición), les comunicó a los trabajadores que está dispuesto a aprobar una constitución que garantice una mayor distribución del poder.
Tenés que leerBielorrusia: "Ni muerto entrego el país" No obstante ello, Lukashenko enfatizó que no hará ese cambio "bajo presión de las manifestaciones y las medidas de fuerza". Ante dicho mensaje, analistas opositores o críticos al gobierno de Lukashenko advirtieron que la promesa de una nueva Constitución podría ser solo una estrategia para ganar tiempo ya que supone un proceso de uno o más años, lo que eliminaría el reclamo de las protestas de repetir ya la elección del 9 de agosto.
Es indudable que la presión en las calles, que dejó un saldo de dos muertos, decenas de heridos y miles de detenidos, obligó a Lukashenko a moderar su retórica. Hace solo unos días había dicho: "Hasta que me maten, no habrá otra elección". Este lunes, miles de manifestantes se concentraron frente a la cárcel Volodarka, en la capital, para pedir la libertad de todos los detenidos en las protestas de la última semana.
En paralelo y un día después de la masiva protesta en Minsk que exigió su renuncia, Lukashenko realizó un acto oficial en una empresa estatal automotriz de la capital y, por primera vez, se enfrentó cara a cara con los manifestantes que piden su renuncia inmediata, algo impensado hace solo unos meses en el país. Durante su alocución fue interrumpido en varias ocasiones por los trabajadores que le gritaron "renuncia" y "mentiroso", de acuerdo a videos filtrados en redes sociales que levantó la cadena británica BBC y el diario The Guardian.
Tenés que leerMacron llamó a la UE a actuar en apoyo de manifestantes en BielorrusiaEl presidente obtuvo el 9 de agosto pasado un sexto mandato consecutivo tras obtener el 80% de los sufragios, contra el 10% que cosechó Svetlana Tijanovskaya, actualmente refugiada en Lituania. Obviamente, la oposición denunció que hubo fraude en esos comicios. Vestidos mayoritariamente de blanco, el color que distingue a los opositores, los manifestantes protestaron r contra los resultados de esas elecciones pero también contra la violencia policial que desde el domingo pasado dejó al menos dos muertos, casi 300 heridos y cerca de 7.000 detenidos.
La Fiscalía General de Bielorrusia informó que casi todos los detenidos durante las manifestaciones fueron puestos en libertad y comunicó, asimismo, que recibió numerosas demandas para abrir expedientes en relación con el abuso de poder de las fuerzas de seguridad. Tijanovskaya descreyó sobre esto y por eso insistió por "la liberación de todos los presos políticos", además de pedir por la realización de nuevas elecciones "reales, justas y transparentes".