El presidente boliviano de centroizquierda, Luis Arce, afirmó que el respaldo popular en las calles ha fortalecido su Gobierno tras un reciente intento fallido de golpe militar, y que continuará trabajando hasta su último día en el cargo.
El presidente boliviano agradeció el respaldo de la ciudadanía y la comunidad internacional para la estabilidad de su gobierno.
El presidente boliviano de centroizquierda, Luis Arce, afirmó que el respaldo popular en las calles ha fortalecido su Gobierno tras un reciente intento fallido de golpe militar, y que continuará trabajando hasta su último día en el cargo.
Esta declaración se produjo en una de sus primeras entrevistas desde el dramático ataque que captó la atención mundial.
Arce se convirtió en el centro de atención global el miércoles, cuando unidades militares rebeldes ocuparon la plaza central de La Paz y embistieron la puerta del palacio presidencial con un vehículo blindado, permitiendo la entrada apresurada de soldados.
"El apoyo de la gente en las calles y el respaldo internacional que hemos recibido nos han fortalecido para volver aquí y continuar con nuestro trabajo", manifestó el mandatario conocido por haber sido clave en los "milagros económicos" de Bolivia a principios de los años 2000 como ministro de Economía bajo el liderazgo de Evo Morales.
"Para nosotros, nada ha cambiado absolutamente (...) Vamos a seguir trabajando hasta el último día", agregó desde la sede del Gobierno en La Paz.
El viernes, la Justicia boliviana ordenó la prisión preventiva para el excomandante del Ejército Juan José Zúñiga, acusado de terrorismo y sedición contra el Estado.