El presidente de Haití, Jovenel Moise, nombró este lunes como nuevo primer ministro a Joute Joseph para tratar de cerrar la profunda crisis política que impide al país tener un gobierno efectivo desde hace un año.
El presidente de Haití, Jovenel Moise, nombró este lunes como nuevo primer ministro a Joute Joseph para tratar de cerrar la profunda crisis política que impide al país tener un gobierno efectivo desde hace un año.
Joseph, actual titular de las carteras de Economía y de Medio Ambiente, fue designado primer ministro "después de las consultas" que mantuvo el mandatario con diversos sectores de la sociedad en los últimos meses, consignó la agencia de noticias EFE.
En un mensaje en su cuenta oficial de Twitter, Moise escribió que eligió a Joseph "después de las consultas que mantuve con diferentes sectores del país" y agregó que le solicitó "que forme, lo antes posible, un gobierno de apertura y de consenso, capaz para responder a las emergencias actuales".
El nombramiento debe ser ratificado por la Cámara de los Diputados y el Senado, pero ambos órganos legislativos están actualmente clausurados, porque el mandato de la mayoría de los legisladores terminó el pasado enero, sin que se haya podido celebrar elecciones por la inestabilidad que atraviesa el país.
Las últimas elecciones parlamentarias estaban previstas para el pasado octubre, pero no llegaron a ser convocadas por la oleada de protestas antigubernamentales que sacudieron el país entre septiembre y noviembre pasados.
Haití no tiene un gobierno efectivo desde el 18 de marzo de 2019, cuando el Parlamento cesó al entonces primer ministro, Jean Henry Ceant, por una moción de censura.
Después de ese episodio, la oposición boicoteó las sucesivas sesiones parlamentarias en las que se iba a votar el nombramiento de los dos primeros ministros designados por Moise en este último año, Jean-Michel Lapin y Fritz William Michel.
El país caribeño atraviesa una fuerte inestabilidad sociopolítica desde julio de 2018 por la debilidad de la economía, las acusaciones de corrupción que salpican al presidente Moise y la creciente inseguridad.
Entre septiembre y noviembre pasados se produjeron manifestaciones violentas que prácticamente paralizaron todas las actividades económicas durante los dos meses que duró el movimiento antigubernamental.
En medio de la crisis, Moise abrió una serie de consultas con sectores de la oposición moderada, así como con empresarios y otros actores de la vida pública, para tratar de encontrar una salida a la crisis.
Moise aspira a promover una reforma constitucional para darle más poderes a la presidencia y facilitar el nombramiento del gobierno, eliminando la obligación de ratificarlo en el Parlamento.
Con información de Télam