Martes 28.4.2020
/Última actualización 20:48
El Instituto Nacional Penitenciario informó sobre los decesos ocurridos el lunes en el penal ubicado en San Juan de Lurigancho y precisó que los reclusos fallecidos cumplían condenas por homicidio, violación sexual, narcotráfico y robo, entre otros cargos.
El organismo peruano dijo además que dos presos, 60 guardias penitenciaros y cinco policías resultaron heridos, tras el operativo policial montado para evitar la "fuga masiva" de detenidos, informó la agencia de noticias EFE.
Más de 200 policías acudieron el lunes a controlar el amotinamiento en varios pabellones del penal ubicado al este de la capital peruana, y al cabo de tres horas lograron recuperar el control interno y externo del establecimiento, según otro informe del comisario policial de Canto Rey, Pablo Vega.
De acuerdo con este reporte, los cadáveres fueron trasladados a la morgue de Lima, algunos con señales de haber sido alcanzados por disparos de armas de fuego.
GentilezaLos presos se amotinaron en queja por el tratamiento de las autoridades ante el avance de la pandemia de coronavirus, que en Perú causó la muerte a 782 personas y contagió a otras 28.669.
El domingo pasado, dos presos murieron en ese mismo penal, presuntamente por la Covid-19. Sin embargo, el gobierno no aumentó las medidas ni propuso un nuevo plan para las cárceles.
Quieren indultos y medidas sanitarias
Los presos el lunes quemaron colchones alrededor de una rotonda y lanzaron objetos a los guardias penitenciarios y policías desde los techos.
En las ventanas de los pabellones exigieron, con carteles colgados, ser considerados en los indultos que el presidente Martín Vizcarra otorgará a unos 3.000 presos debido a la emergencia sanitaria.
Además, reclamaron por medicamentos para tratar el coronavirus.
La población penitenciaria que se beneficiará con unos 3.000 indultos es principalmente la de adultos mayores, y mujeres gestantes o con niños menores de tres años, además de quienes estén próximos a cumplir sus sentencias.
Las autoridades no dieron señales de estar pensando en ampliar los indultos, pero sí compraron 200.000 pastillas de azitromicina para distribuirlas en los penales a nivel nacional y, en esta cárcel en especial, entregaron 5.864 barbijos, 2.000 pastillas de azitromicina y 682 pruebas rápidas de descarte de la Covid-19.
Con información de Télam.