Estados Unidos, Israel y varias potencias europeas, todos países con un importante stock de vacunas y acuerdos para comprar más dosis, avanzaban hoy con rapidez en la vacunación contra el coronavirus pero no lograban controlar la segunda ola de la pandemia que, en varios casos, los golpeó más fuerte que la primera y los llevó a imponer nuevamente duras restricciones.
Mientras el mundo daba cuenta de la expansión de la Covid-19 con 609.476 contagios y 9.943 muertes en las últimas 24 horas, el vocero de la Cancillería china, Zhao Lijian, ratificó que un grupo de 10 expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) viajará el jueves desde Singapur a Wuhan, donde se detectó el primer caso, para investigar su origen.
"Se trata de comprender los orígenes de la pandemia, no de encontrar un responsable", declaró el director de emergencia sanitaria de la OMS, Michael Ryan, citado por la agencia de noticias AFP, ante una China ansiosa por descartar cualquier responsabilidad en una epidemia prácticamente erradicada en su país y que controla con restricciones y las aplicación de las vacunas de Sinopharm y Sinovac.
En el país más afectado a nivel global por la pandemia, Estados Unidos, con más de 22,7 millones de infectados y 378.457 muertes, las autoridades anunciaron hoy que el parque de atracciones de Disneylandia, situado en el estado de California, se convertirá en un gran centro de vacunación contra el coronavirus, con capacidad para miles de personas cada día.
El presidente del condado de Orange, Andrew Do, señaló que las instalaciones serán el primer punto de vacunación e hizo hincapié en el papel de Disneylandia "para hacer frente a una tarea monumental en el proceso de distribución de vacunas", según el comunicado replicado por la agencia Europa Press.
Por otra parte, el gobierno federal resolvió que los viajeros que lleguen al país a partir del 26 de este mes deberán llevar una prueba de coronavirus con resultado negativo hecha dentro de los tres días previos al vuelo.
"Hacer test no elimina todos los riesgos, pero cuando se combina con un periodo de cuarentena y las precauciones cotidianas como llevar mascarilla y la distancia social, puede hacer los viajes más seguros", explicó el director de la red estatal de Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), Robert Redfield.
No parece correr la misma suerte Brasil, donde el titular de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, advirtió que el presidente Jair Bolsonaro puede ser blanco de un juicio político en caso de que fracase el proceso de vacunación contra la Covid-19.
La campaña de vacunación está envuelta en polémicas por la falta de fecha de inicio, y el país, con más de 203.000 fallecidos, es el segundo con más muertes en el mundo, solo superado por Estados Unidos.
En Israel, en cambio, donde el plan de inmunización ya alcanzó a más del 10% de su población, se volvió a registrar hoy un nuevo récord con cerca de 10.000 casos y más de 3.700 decesos.
Ello sucedió en medio de su tercer confinamiento y mientras las autoridades de los territorios palestinos, de los que es potencia ocupante, reiteraron que Israel incumple su obligación de suministrar vacunas contra el coronavirus a los habitantes de esos espacios.
En simultáneo, en el continente europeo, uno de los más golpeados durante la segunda ola de coronavirus con más de 620.000 defunciones, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) anunció que AstraZeneca y la Universidad de Oxford solicitaron autorización para el uso de su vacuna en la Unión Europea (UE), que podría decidir al respecto el 29 de enero.
De aprobarse, el inyectable sería el tercero disponible en los 27 países de la UE, que buscan acelerar el despliegue de las campañas de vacunación, después del visto bueno a los de Pfizer/BioNTech y Moderna, con las que concretan la estrategia de vacunar a los mayores primero.
España, por su parte, registró hoy más de 25.400 contagios y 408 muertes por Covid-19 en un día, en medio de un índice alcista como consecuencia de las fiestas de fin de año y pese al aumento de restricciones y medidas preventivas, por lo que el ministro de Salud Salvador Illa advirtió en que el país afronta unas semanas "muy duras", según la agencia Sputnik.
Asimismo, el Reino Unido rozaba los 3,2 millones positivos y superaba los 82.000 decesos desde el inicio de la pandemia, tras sumar en las últimas 24 horas 45.533 y 1.243, respectivamente, en medio de una cuarentena total impuesta desde la semana pasada ante la suba de contagios por una nueva cepa del coronavirus descubierta a principios de diciembre y la campaña de inoculación.
En Italia, el Gobierno reforzó hoy su programa de vacunación gratuita y voluntaria, que ya alcanzó a 731.539 personas, con la llegada de 47.000 dosis de la vacuna de Moderna, que se suma a las cerca de 470.000 dosis semanales que recibe de la producida por Pfizer/BioNTech, replicó la cadena Sky, luego de que el Ministerio de Salud informara de 14.242 contagios y 616 víctimas en la víspera.
Además, en Portugal, el presidente Marcelo Rebelo de Sousa dio negativo en coronavirus tras un primer test que había sido positivo, informó la Presidencia, mientras el primer ministro, el socialista António Costa, avisó que el Gobierno estaba preparándose para anunciar mañana "algo muy parecido al primer confinamiento de marzo", tras informar un nuevo récord con 122 muertos en 24 horas y cerca de 4.000 hospitalizados.