Vladimir Putin ordenó el cierre de la frontera con China en el extremo oriente de Rusia, como medida de prevención ante el creciente brote de la nueva cepa de coronavirus, que ya dejó 170 muertos y miles de infectados en el gigante asiático.
Vladimir Putin ordenó el cierre de la frontera con China en el extremo oriente de Rusia, como medida de prevención ante el creciente brote de la nueva cepa de coronavirus, que ya dejó 170 muertos y miles de infectados en el gigante asiático.
“Informaremos a todos sobre el cierre de fronteras en el Extremo Oriente, así como otras medidas tomadas por el gobierno”, adelantó el ministro de Salud, Mikhail Mishustin, en una reunión de gabinete, sin dar plazos sobre la medida.
El Kremlin ya ha formado un equipo de tareas enfocado en el virus, para evitar que se extienda por el país, y pidió a los ciudadanos que eviten viajar a China si los motivos no son de urgencia. Por el momento, no se ha confirmado ningún caso de la cepa en territorio ruso.
Por su parte, la ministra de Transportes indicó que limitaría considerablemente el servicio de trenes entre ambos países. Así, solo quedará en funcionamiento el trayecto que une directamente a Moscú con Beijing.
Además, indicó que el gobierno está realizando los planes para repatriar a sus ciudadanos que están en China, medida ya tomada por otros países.
Todavía está pendiente la decisión sobre los vuelos entre ambos países y el tema sería definido el viernes.