Las autoridades rusas ordenaron este miércoles el arresto de Leonid Volkov, un colaborador del opositor Alexey Navalny, a quien calificaron de traidor por pedir a la Unión Europea (UE) que imponga sanciones contra Rusia, a la vez que la Fiscalía Rusa propuso estudiar la posibilidad de demandar a quienes desde el extranjero organizan "acciones ilegales" en el país.
El Tribunal Moscovita de Basmanny explicó que Volkov, residente de Lituania, fue incluido en la base de datos de personas buscadas por la Comunidad de Estados Independientes (CEI), que engloba a la mayoría de las ex repúblicas soviéticas. La vocera del Tribunal, Irina Morozova, precisó que Volkov está siendo buscado "por haber incitado a menores a cometer actos ilegales", un delito que puede costarle hasta tres años de prisión.
La acusación hace referencia a su convocatoria en enero a manifestar en unas protestas no autorizadas contra el gobierno. En esa misma plataforma, Volvok había dicho el lunes que había discutido con representantes de los países de la UE un paquete de sanciones personales contra miembros del entorno del presidente ruso, Vladimir Putin, en respuesta al encarcelamiento de Navalny.
El anuncio llevó a Moscú a calificar el acto de "traición", por el hecho de que ciudadanos rusos hablen con otros países acerca de ese tipo de medidas. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, consideró por su parte que habría que legislar para calificar de "actos criminales" los llamados a sanciones contra Rusia.
La UE reclamó en reiteradas ocasiones la liberación de Navalny, encarcelado desde el 17 de enero, y acusa a Moscú de negarse a investigar el presunto envenenamiento del que el opositor fue víctima el pasado agosto, y que llevó a los europeos a sancionar a varios responsables rusos.
Buscan a los instigadores
Paralelamente, la Fiscalía General de Rusia propuso estudiar la posibilidad de demandar a las personas que desde el extranjero organizan "acciones ilegales" en el país, reveló Alexey Zhafiarov, un representante de la entidad. "Me gustaría señalar dos puntos, primero, que en la actualidad es bastante difícil juzgar por la organización de eventos públicos masivos a los ciudadanos que se encuentran en el extranjero y actúan como organizadores", expuso Zhafiarov en la Duma de Estado.
"Segundo, que es casi imposible, porque tal vez sea necesario pensar en ciertos mecanismos para llevarlos ante los tribunales en ausencia", agregó el funcionario. Horas antes, el jefe de la comisión de la Duma de Estado (Cámara Baja del Parlamento) que investiga la injerencia en los asuntos internos de Rusia, Vasili Piskariov, denunció que existen datos acerca de que ciertos ciudadanos extranjeros están involucrados en la publicación de informaciones falsas en las redes sociales sobre concentraciones no autorizadas.
Las protestas exigían la liberación de Navalny, detenido a mediados de enero a su regreso de Alemania tras recuperarse de un envenenamiento que atribuyó a Putin, y expresaban indignación por la supuesta corrupción de las autoridades rusas, situación denunciada por el político. Por su parte, el Servicio Federal de Telecomunicaciones ruso informó haber multado a la Radio Liberty/Radio Free Europe, financiado por Washington, al no cumplir con las obligaciones inherentes a su condición de "agente extranjero".
El monto total de las multas alcanza a 11 millones de rublos, poco más de 149.000 dólares, tal cual lo indicó el servicio federal. La misma fuente aclaró que la empresa fue condenada a sanciones económicas, por el momento vinculadas a 40 informes elaborados a causa de la mención inadecuada de la condición de "agente extranjero" en nueve sitios web dependientes de ese medio.