Los gremios franceses se manifestaron una vez más en contra de la reforma jubilatoria del presidente Emmanuel Macron. Los manifestantes alegan que los planes de elevar la edad jubilatoria es una amenaza a todo el modelo social.
Se trata de la sexta jornada en la que los gremios salen a la calle a manifestarse en rechazo al proyecto de elevar la edad para jubilarse.
Los gremios franceses se manifestaron una vez más en contra de la reforma jubilatoria del presidente Emmanuel Macron. Los manifestantes alegan que los planes de elevar la edad jubilatoria es una amenaza a todo el modelo social.
Se trata de la sexta jornada de huelga contra la reforma jubilatoria desde el 19 de enero en la segunda economía de la Unión Europea (UE). Los huelguistas bloquearon la expedición de combustible de todas las refinerías
Según los sondeos, dos de cada tres franceses se oponen a su proyecto de retrasar la edad de jubilación para 2030 y adelantar a 2027 la exigencia de cotizar 43 años (y no 42, como ahora) para cobrar una pensión completa.
El Gobierno plantea que elevar una de las edades de jubilación más bajas de Europa busca evitar un futuro déficit en la caja de las pensiones, en un contexto de aumento de la esperanza de vida de la población.
La última vez que los franceses lograron frenar una reforma de las pensiones fue en 1995. Los sindicatos paralizaron los servicios de tren y metro durante tres semanas y lograron mantener un apoyo masivo en la opinión pública.
En esta nueva jornada los sindicatos esperan sacar "más de dos millones" de personas a la calle.
Con el servicio de trenes y el transporte público de París "muy perturbados", el gobierno llamó a los franceses que puedan a trabajar desde casa.
Sin embargo, con un 60% de los maestros de educación infantil y primaria en huelga y miles de escuelas cerradas, muchos de ellos se vieron obligados a buscar alternativas para el cuidado de sus hijos.
Una quinta parte de los vuelos se cancelaron en el aeropuerto Charles de Gaulle de París y alrededor de un tercio de los vuelos se cancelaron en el aeropuerto de Orly.
Se esperaba que no hubiera trenes a Alemania y España, y los que van y vienen de Gran Bretaña y Bélgica se reducirán en un tercio. Mientras que la mayoría de los trenes de alta velocidad y regionales no funcionan.
Aunque el objetivo es bloquear la economía, el impacto económico de las huelgas será "limitado", según los analistas del banco ING, para quienes, incluso en caso de largos bloqueos, no será superior a 0,2 puntos porcentuales del PIB.